La aceleradora biotech, The Ganesha Lab (TGL), llega a México para hacer sinergia con emprendimientos y perfeccionar o mejorar sus modelos de negocio, productos, patentes y equipo, con el fin de proyectarlos en mercados internacionales, particularmente Estados Unidos.
La incubadora, liderada por Markus Schreyer, CEO fundador-ex director de Thermo Fisher Scientific en Latam- se prepara para convertirse en una Venture Capital, por lo que proyecta invertir fondos en empresas mexicanas y latinoamericanas: “Buscamos nuevas empresas de biotecnología en etapa inicial con el potencial y la visión para generar un impacto global”, destacó.
En este punto, cabe destacar que ya existe un primer caso de éxito mexicano en el área médica, en manos de la empresa BlepsVision, que desarrolló un topógrafo corneal portátil que permite el análisis de la curvatura de la córnea, identificando, por ejemplo, posibles deformaciones.
Al respecto, Catalina Fernández, Program Manager de TGL, indicó que la internacionalización de empresas o emprendimientos enfocados a la biotecnología es vital para cambiar la calidad de vida de las personas y poder generar impacto, “por lo que trabajamos activamente con nuestros emprendedores para transmitirles el mindset internacional y facilitarles las herramientas y redes de contactos necesarios para impulsar su proceso de globalización”.
A través de un programa muy amplio, se permite a las startups incorporarse a un sistema de trabajo que les dará acceso a mentorías y talleres durante tres meses, enfocados en temas como Business Base Line, Clients & Markets, Global Success, Scaling & Capital Raise- hasta reuniones individuales con sociosy expertos en la materia.
Posteriormente, los emprendedores participan en un programa de soft-landing virtual de dos semanas en Estados Unidos, realizado con el Cambridge Innovation Center Miami (CIC). Una vez finalizado se lleva a cabo un evento final en donde los participantes presentan sus soluciones -mediante un pitch– ante un selecto jurado internacional, ocasión en la que se seleccionan a las dos empresas mejor preparadas para acceder al mercado internacional y que cuenten con un gran potencial de escalamiento.
Los ganadores acceden a un programa de International Market Validation (Validación de Mercado Internacional o IMV, por sus siglas en inglés) donde pueden escalar con trabajo real y presencial con inversionistas, mentores y potenciales clientes, por dos meses en territorio estadounidense.