Twitter fue víctima de un segundo ataque en menos de una semana. Esta vez tweets que promovían la zoofilia, y que obviamente no fueron escritos por los usuarios, fueron emitidos desde varias cuentas.
Una nueva falla de seguridad quedó de manifiensto después de que el domingo por la tarde, durante más de una hora, apareciera un “tweet” con un mensaje de carácter zoofílico que, una vez que se daba clic sobre el enlace que lo acompañaba, reenviaba este mensaje de forma involuntaria a otros usuarios, acelerando su extensión por toda la red.
Twitter apuntó que este contratiempo, que consiguieron controlar al cabo de una hora de su detección, se debe a “una vulnerabilidad provocada por los recientes cambios realizados”.
Esta problemática ocasionó el lanzamiento de su propio acortador de URLs. En breve sólo serán efectivos aquellos enlaces que utilicen t.co.