Un UPS (Uninterruptible Power Supply o Sistema de Alimentación Ininterrumpida) es un equipo que proporciona energía de respaldo a equipos electrónicos durante cortes de energía o variaciones de voltaje. Funciona almacenando energía en baterías y la libera cuando la red eléctrica falla. Esto protege los equipos conectados de daños y pérdida de datos, permitiendo un apagado seguro o dando tiempo para respaldar el trabajo en curso o finalizar un proceso.
Si bien numerosos componentes del UPS son susceptibles a fallas, un plan de servicio de mantenimiento preventivo se asegura de que estas piezas se examinen con regularidad, lo que reduce en gran medida el riesgo de pérdida de carga y extiende la vida útil general del equipo de respaldo de energía. El mantenimiento preventivo mejora drásticamente el rendimiento, la disponibilidad y la vida útil de los equipos críticos y reduce significativamente la cantidad de problemas que puede experimentar su equipo.
En el mundo actual, donde la tecnología es fundamental para el funcionamiento de las grandes empresas, los UPS se han convertido en elementos cruciales para garantizar la continuidad del negocio. Su importancia radica en su capacidad para mitigar las repercusiones negativas que estos eventos pueden ocasionar.
Las interrupciones en el suministro eléctrico pueden generar pérdidas de datos, daños en equipos electrónicos, retrasos en la producción y afectar la productividad y la rentabilidad de una empresa.
De acuerdo con Eaton y su división de Energía Crítica, los seis componentes principales del UPS que requieren mantenimiento preventivo son los siguientes.
- Baterías. La vida útil de la batería del UPS se ve afectada por muchos factores, incluidos la vida útil de almacenamiento, la temperatura ambiente, la química de la batería y los ciclos de carga y descarga. El mantenimiento de la batería de este tipo de equipos puede permitirle calcular cuándo se llegará al final de la vida útil y cuándo deben programarse los reemplazos.
- Capacitores. Un capacitor es una refacción que almacena y libera energía eléctrica. Pueden ser muy pequeños o tan grandes como una lata de refresco. Para maximizar el rendimiento y la confiabilidad del UPS, deben manejarse los capacitores como el producto perecedero que son y planificar reemplazarlos al final de su vida útil nominal.
- Ventiladores. Algunos ventiladores funcionan solo durante períodos cortos por motivos mecánicos, por lo que es recomendable su revisión semestral.
- Filtros de aire. ¿Sabías que el polvo puede bloquear los filtros de aire del UPS y hacer que el equipo se apague debido al sobrecalentamiento? Para evitar esto, los filtros de aire del UPS deben inspeccionarse al menos dos veces al año. Reemplazar los filtros de aire es una actividad que si así se determina, se reemplaza en un plan de mantenimiento de UPS completo y efectivo.
- Conexiones de componentes de UPS. Las vibraciones de edificios, proyectos de construcción locales o maquinaria cercana al UPS pueden afectar las conexiones internas. Eaton recomienda que se revisen los UPS dos veces al año en busca de puntos críticos tanto en el equipo, como los gabinetes de baterías.
- Fuentes de alimentación redundantes. Aunque un UPS tiene fuentes de alimentación redundantes, es posible que las fuentes de alimentación sufran sobretensiones de voltaje de entrada, lo que puede causar tensión y sobrecalentamiento inesperados. Pueden detectarse y evitarse posibles problemas si realizan inspecciones con regularidad.