Un gran porcentaje de las instituciones bancarias están preocupadas porque podría perder parte de su negocio ante las nuevas FinTech, que conocen mejor las cambiantes necesidades de los clientes. A medida que trabajan para mejorar el servicio al cliente, muchos bancos están estableciendo sociedades con empresas FinTech y son los clientes quienes reciben los beneficios.
Los principales resultados de la Global FinTech Survey 2016 de PwC, destacan que el 76% de los bancos que participaron en la encuesta cree que parte de su negocio está en riesgo ante la llegada de las FinTech. Considera que estas nuevas empresas se enfocan directamente en el usuario final y están haciendo a un lado a los bancos. Por lo tanto, no resulta sorprendente que la pérdida de su participación de mercado y la presión en sus márgenes sean los principales riesgos que afronta la industria bancaria.
El 75% de la muestra señaló tener un mayor enfoque en el cliente como el principal impacto de las FinTech en sus negocios. Pero mientras el enfoque en el cliente es un punto débil para los bancos tradicionales, es una fortaleza para las nuevas empresas, las que han identificado las frustraciones de los clientes como oportunidades y están generando soluciones para darles una respuesta; entretanto, los bancos tradicionales siguen quedándose atrás al ofrecer mejoras incrementales.
Esto puede explicar por qué la competencia entre los bancos y las nuevas empresas está empezando a generar una colaboración directa. Los bancos son los más activos en todos los sectores financieros en lo que respecta a la asociación con las FinTech. El 42% de los bancos encuestados dice estar en proceso de establecer una sociedad o estar invirtiendo en el financiamiento de las FinTech.
Manoj Kashyap, líder global de FinTech de PwC, señaló, “los clientes buscan conveniencia, personalización, accesibilidad y facilidad de uso. Para responder a estas expectativas, los bancos y las FinTech deben enfocarse en las oportunidades que aprovechen las fortalezas de ambos, ya sea el diseño y desarrollo de productos de las nuevas empresas o la distribución y la infraestructura de los bancos. Las FinTech son excelentes ofreciendo simplicidad en productos y una excelente integración, pero no cuentan con la seguridad de TI ni la certidumbre regulatoria que tienen los bancos. Ambas partes se están dando cuenta de las ventajas de una relación nueva en beneficio mutuo y, finalmente, serán los clientes quienes más ventajas obtengan de todo esto”.
Advierte Kashyap que, a pesar de que la cooperación entre los bancos tradicionales y las nuevas empresas es importante, la ejecución aún está empezando y llegar a un acuerdo en torno a las mejores formas de trabajar juntos puede tomar algún tiempo.
Finalmente, Gonzalo Nuñez, Socio líder de la práctica de FinTech de PwC México, destacó, los bancos deben empezar a simplificar productos y servicios para facilitar la comparación entre los diferentes actores del mercado y reducir la confusión entre los clientes. Al mismo tiempo, es esencial que los bancos diseñen productos considerando la experiencia de los usuarios en lugar de enfocarse en los ‛procesos comunes conforme a los lineamientos de diseño’. Además, los bancos deben escuchar la retroalimentación de los clientes y convertirla en ofertas oportunas. Es necesario realizar estas acciones independientemente de la disrupción generada por las FinTech”.
Redacción
