COBOL es un lenguaje de programación, acrónimo en inglés de Common Business Oriented Language o Lenguaje Común Orientado a Negocios. Surgido en Estados Unidos, su objetivo era que las instituciones y empresas tuvieran un lenguaje estándar de desarrollo para que la interacción entre ellas fuera más sencilla.
COBOL gozó de un desarrollo y aceptación amplios, sobre todo en el sector financiero, que lo adoptó tanto como las empresas que le daban seguimiento a este sector.
En los servicios financieros y de telecomunicaciones, el lenguaje fue de uso común, así como la demanda de gente que supiera COBOL asociado a que en aquel entonces los mainframes de IBM eran los que se vendían para que creciera la industria de la informática y contribuyeron. Hoy, casi seis décadas después, hay muchos bancos que conservan su sistema central en COBOL.
En sus inicios, este lenguaje de programación compartió escenario con RPG, Pascal, BASIC o C, pero su transaccionalidad le permitió a COBOL mantenerse. El de hoy es otro panorama, existen diversas arquitecturas y casi nadie usa ni conoce a COBOL.
Los sistemas actuales ya no se modifican en donde reside COBOL. Antes las arquitecturas eran más sencillas: se hacía la estructura del negocio, front y middleware; hoy las capas de arquitectura se han diversificado y tenemos otros tipos de lenguajes con mejor desempeño en esa capa de arquitectura.
¡Larga vida a COBOL!
Actualmente COBOL no es un lenguaje común, ya que se usa en las capas inferiores de la infraestructura. Sin embargo, las proyecciones indican que continuará con vida, por los menos los siguientes 30 años, ya que no ha sido necesaria una evolución en esa capa. El desarrollo hoy se hace más en los dispositivos móviles.
De esta manera, COBOL se seguirá utilizando, aunque sea menos demandado, y a medida que las empresas financieras y de telecomunicaciones decidan sustituir su sistema central, COBOL cambiará. Hoy, esos mercados verticales y el de seguros, corren sus sistemas centrales en este lenguaje, lo que les permite a los sistemas “llevar el negocio”, calcular las tasas de interés, autorizar transacciones o identificar sus un usuario es persona física o persona moral.
Además, se han creado interfaces para hacer a COBOL más amigable, se ha modificado gráficamente y se han creado accesos en los que el lenguaje no genera operaciones, aunque toda su información puede ser accedida en una capa superior y todo el nuevo desarrollo de lenguajes lo consulte allí. Estas interfaces ayudan a que no se utilice COBOL (porque no es necesario) y de una forma más amigable se pueda acceder a la información en el sistema central. Por lo anterior, no hay en el mercado industrias que busquen la evolución de COBOL.
En las empresas de hoy es mínimo el requerimiento de especialistas en COBOL y aunque no es una tecnología que no se desea tener, es importante que la gente que programa tenga conocimientos de él, ya que muchos de los problemas tienen qué ver con la lógica y esa forma de pensamiento o de elaborar los procesos fue, precisamente, el éxito de COBOL.
Por Esteban Alejandro Hernández González, gerente en GFT México.