El design thinking (o pensamiento de diseño) evita los procesos de desarrollo tradicionales en favor de un método ágil y flexible para desarrollar productos y servicios con un enfoque único en el cliente.
Definición del design thinking
El design thinking es un proceso ágil e iterativo para el diseño y la innovación que centra los deseos y necesidades de los usuarios y permite que su empresa gire a medida que la industria cambia y la tecnología evoluciona. El design thinking o reconoce que no hay una sola forma de resolver un problema. En cambio, la metodología fomenta el cuestionamiento, la experimentación, la observación y la innovación en un entorno que acoge diversas opiniones e ideas.
Con el design thinking no dependerá de la jerarquía corporativa tradicional para obtener ideas y aprobación. En cambio, fomentará una cultura que aliente a los empleados a desafiar las tradiciones corporativas y facilite riesgos inteligentes y calculados.
Beneficios del design thinking
Uno de los mayores atractivos para implementar el design thinking es que hacerlo puede estimular ideas innovadoras a medida que su equipo recorre las fases de inspiración, ideación e implementación, a menudo golpeando cada ciclo más de una vez a medida que desarrolla nuevas ideas y explora nuevas soluciones.
Mientras que la mayoría de los marcos y metodologías se dividen en pasos, el design thinking no debe abordarse de manera rígida y ordenada. Puede saltar entre ciclos y procesos como mejor le parezca, hasta lograr la solución y el diseño correctos.
A medida que surgen nuevas tecnologías, el design thinking se convierte en un medio importante para convertir estas tecnologías en servicios y productos fáciles de usar. El design thinking abarca el cambio rápido de la tecnología con una perspectiva positiva que considera todas las posibilidades, sin importar cuán “afuera” o creativo sea. Esa actitud será cada vez más importante a medida que las empresas encuentren formas nuevas y emocionantes de hacer uso de la tecnología emergente.
Principios del design thinking
El design thinking se utiliza para crear diseños centrados en el ser humano que sean fáciles de usar y para entregar la tecnología a los usuarios de una manera intuitiva y natural. Hay una serie de principios básicos que lo definen. Estos no pretenden ser instrucciones paso a paso para presentar el design thinking a su empresa, pero son los principios en los que debe basarse su estrategia al respecto, a saber:
- Problemas perversos: una frase desarrollada por los teóricos del diseño Horst Rittel y Melvin Webber, “problemas perversos” significa problemas mal definidos o difíciles que tienen soluciones poco claras y requieren un pensamiento creativo o estrategias no tradicionales para resolver.
- Encuadre de problemas: con el design thinking, hay más de una forma de ver un problema. Los problemas no se toman al pie de la letra. En cambio, se recontextualizan y reinterpretan para encontrar una solución.
- Pensamiento centrado en la solución: en lugar de centrarse en los problemas, un modelo de design thinking busca primero las soluciones, lo que puede ayudar a mejorar la comprensión del problema.
- Razonamiento abductivo: esta forma de inferencia lógica comienza con una observación o un conjunto de observaciones y luego le pide que encuentre la explicación más simple y probable para los problemas observados. Es un estilo importante de razonamiento que se utiliza en el design thinking para replantear problemas o ideas para encontrar varias formas de abordar el problema o la oportunidad.
- Co-evolución del problema y la solución: cuando los pensadores del diseño trabajan en un problema, cambian entre pensar en el problema y buscar ideas para una solución que les ayude a generar aún más ideas de solución.
- Representaciones y modelado: los modelos informáticos y los prototipos físicos se utilizan para identificar requisitos, que a veces pueden ser abstractos, y para permitir que su equipo pruebe, refine y evalúe nuevas ideas.
Proceso del design thinking
Hay cuatro fases principales del design thinking que su equipo recorrerá mientras desarrolla soluciones y productos. En lugar de ofrecer una receta detallada a seguir, el design thinking proporciona una estructura flexible que puede interpretar según sea necesario para las necesidades de su negocio. Los elementos de esta estructura flexible son:
- Inspiración: ésta suele ser la primera fase del proceso de diseño durante la cual tratará de comprender el problema o la oportunidad. Querrá establecer objetivos, puntos de referencia, puntos clave de contacto, requisitos, necesidades tecnológicas y cómo su solución o producto encajará en el mercado de la industria.
- Empatía: la empatía es posiblemente una de las fases y principios más importantes del design thinking. Al diseñar soluciones, productos, servicios o hardware, debe comprender verdaderamente la perspectiva del cliente o usuario final.
- Ideación: esta fase implica desarrollar tantas ideas como sea posible utilizando tanto el pensamiento divergente como el convergente. Alternará entre el pensamiento divergente, que involucra a un grupo diverso de personas que participan en una lluvia de ideas estructurada, y el pensamiento convergente, que se concentra en las mejores ideas para seleccionar una a seguir.
- Implementación y creación de prototipos: una vez que haya establecido algunas de las mejores ideas, es el momento de modelar y crear prototipos mediante la creación de productos y servicios reales que se puedan probar, evaluar y perfeccionar.
Sarah K. White, CIO.com