El pasado 25 de septiembre, se celebró el 6º Aniversario de la aprobación de la Agenda 2030 y de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). El transporte de carga terrestre en México desempeña un papel crucial en la economía del país, pero también presenta desafíos significativos en términos de seguridad vial y calidad del aire. En línea con la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, México ha establecido objetivos de desarrollo sostenible para abordar una serie de desafíos que van desde la reducción de la pobreza hasta la preservación del medioambiente. A continuación se presentan cuáles son los ODS en los que el transporte de carga en México puede apoyar.
ODS 3: Salud y Bienestar
El transporte de carga ha estado históricamente asociado con altas tasas de accidentes de tráfico. Sin embargo, el sector está trabajando activamente para abordar este problema.
La profesionalización del sector, incluyendo la formación de conductores en seguridad vial, está disminuyendo la incidencia de accidentes mortales en las carreteras mexicanas. Estos esfuerzos conjuntos están ayudando a México a avanzar hacia la meta del ODS 3 de reducir las muertes causadas por accidentes de tráfico.
Para Ernesto del Blanco, director general de ELAM-FAW, empresa mexicana dedicada a la producción y distribución de vehículos pesados, es fundamental este punto, por lo que ELAM-FAW está desarrollando una plataforma de capacitación para operadores, la cual también se pueda complementar con un simulador y así contribuir a la educación vial que pueda disminuir los accidentes en carretera.
ODS 7: Energía asequible y no contaminante
El estudio del Banco Mundial “Hoja de ruta para la acción climática en América Latina y el Caribe 2021-25” marca que Las emisiones de los sistemas energéticos, principalmente vinculadas a la combustión de combustibles fósiles, representan el 43 % del total de las emisiones en América Latina y el Caribe, incluyendo el 15 % provenientes del transporte.
Uno de los mayores desafíos en el transporte de carga pesada es la eficiencia energética y la reducción de emisiones. La transición hacia combustibles más limpios y tecnologías de transporte sostenible, como vehículos a gas natural, puede contribuir directamente al ODS 7. Además, la implementación de prácticas de gestión de flotas más eficientes puede reducir el consumo de combustible y, por lo tanto, las emisiones de gases de efecto invernadero.
Sobre este punto, del Blanco comenta que hace falta mayor promoción en la oferta de vehículos, ya que en el país existen camiones y tractocamiones impulsados a gas natural, los cuales emiten menos partículas contaminantes al ambiente. Además de que como país tenemos un gran potencial para aprovechar el gas natural como combustible de transición hacia fuentes de energía más limpias.
ODS 9: Industria, innovación e infraestructura
Mejorar la infraestructura vial y logística es esencial para aumentar la eficiencia del transporte terrestre de carga pesada. La inversión en carreteras de calidad, puentes y sistemas de transporte intermodal puede contribuir al ODS 9.
Aunque la realidad es otra ya que en un artículo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se expone que en las últimas décadas, América Latina y el Caribe ha invertido mucho menos que otras zonas en desarrollo. En promedio, sólo el 1,8% del PIB de la región se destinó a la infraestructura entre 2010 y 2020. Para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, acelerar la transición energética verde y descarbonizar el transporte, los países de ALC deben invertir más y mejor.
ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles y ODS 12: Producción y Consumo Responsables
El transporte de carga pesada también tiene un impacto significativo en áreas urbanas. La congestión del tráfico y la contaminación del aire son problemas comunes en las ciudades mexicanas. Promover la adopción de prácticas de entrega más limpias y la implementación de zonas de bajas emisiones puede contribuir al ODS 11. En el país se han iniciado programas piloto en ciudades como Ciudad de México para reducir las emisiones de vehículos de carga.
La adopción de vehículos menos contaminantes y eficientes reduce las emisiones de partículas en las áreas urbanas, mejorando la calidad del aire y la salud de los residentes. La profesionalización del sector incluye la implementación de prácticas logísticas más eficientes, como la consolidación de cargas y la programación de entregas, lo que reduce la congestión en las ciudades.