Uno de los objetivos que tienen las empresas para innovar, es aumentar la competitividad y eficiencia haciendo uso de la Inteligencia Artificial. Hoy en día, es imprescindible ofrecer modelos de almacenamiento para entornos de nube híbridos, además de soluciones de gestión de datos inteligentes para la IA. Cada vez más, los clientes necesitan mantener el ritmo actual de innovación, para ofrecer mejores experiencias digitales, que requieren un procesamiento de datos de alta capacidad y de un almacenamiento inteligente, una infraestructura de datos inteligente con posibilidad de escalar en tamaño y tiempo.
La creatividad empresarial está demandando más innovación de productos, más productividad y más desarrollos de aplicaciones con IA que ofrezcan mejores experiencias a los consumidores. Para ello, es crucial disponer de una IA con una infraestructura robusta, con capacidad de almacenar datos, tanto en local, como en la nube, el perímetro, en entornos híbridos o multicloud; una infraestructura de datos inteligente.
El riesgo que supone mover datos de un entorno a otro y poder perder información o que exista una brecha de seguridad, hace que los clientes busquen socios tecnológicos que les garanticen una gobernabilidad y gestión de datos única y unificada y que dispongan de soluciones de almacenamiento inteligente que permiten mover datos entre todos los entonos de un cliente, sin interrupciones y con total garantía.
Hoy en día, la IA generativa ya permite a los usuarios realizar una solicitud, utilizando un lenguaje natural y la IA interpreta y genera información, ya sea en texto, artículos, código, música, video, voz, efectos visuales, diseños de 3D, análisis de ingeniería… un sinfín de posibilidades que usan modelos de aprendizaje automático (ML). Un ejemplo son las soluciones de IA generativas como las LLM que necesitan leer y procesar infinidad de veces sus datos desde donde se encuentran almacenados en origen, a la memoria, para poder fomentar y propiciar la inteligencia. En los próximos años, la necesidad de gestionar volúmenes masivos de datos va a seguir creciendo y es ahí donde la tecnología de un buen partner tecnológico es diferencial.
La tecnología de fabricantes en el sector del almacenamiento facilita enormemente el acceso a una gran cantidad de datos muy distintos, a los que debe acceder la IA, ubicados en diversos repositorios y con uso de cargas de trabajo de alto rendimiento. Gracias a ella, se pueden generar repositorios de datos inmensos, tanto en entornos de all-flash o de nube pública, como entornos híbridos o del perímetro.
Estamos hablando de permitir acceder simultáneamente a múltiples modelos de IA, incluso en entornos de producción, lo que puede significar un cambio sustancial para el modelo de negocio de muchas empresas. Firmas de analistas de investigación como McKinsey afirman que “El impacto de la IA generativa en la productividad podría suponer billones de dólares para la economía global”.
Las empresas que estén abrazando desarrollos de IA para su negocio, deben disponer de una infraestructura de datos inteligente que involucre tecnología de almacenamiento que no sólo sea capaz de garantizar ejecuciones de cargas de trabajo en infraestructuras seguras y de alto rendimiento, sino que ofrezca entornos escalables y diversos, permitiendo que se pueda trabajar con cualquier proveedor de cloud público, acceder a cualquier repositorio de datos, esté donde esté, y puedan gestionar estos entornos híbridos y multicloud de manera sencilla, fácil y segura.
Por: Elena Viniegra, directora de Cloud en Netapp EMEA y Iberoamérica.
