Los usuarios son cada vez más conscientes de la importancia de la protección de datos. La digitalización, el aumento del tiempo en Internet, así como la proliferación de los ciberataques, ha provocado que también seamos más precavidos a la hora de facilitar datos en Internet.
De acuerdo a un estudio realizado por IAPP, la Asociación Internacional de Profesionales en Privacidad, el 68% de los consumidores de todo el mundo se encuentran preocupados por su privacidad en Internet y el 67% decidió no realizar una compra online por motivos de privacidad; demostrando una creciente inquietud por parte de los usuarios que no debe de pasar desapercibida para las empresas, las cuales deben de reforzar sus procesos de ciberseguridad para asegurar la protección de datos de sus clientes.
Promover la protección de datos:
● Invertir en soluciones de protección de identidad: una de las principales maneras de proteger los datos es resguardar las credenciales de tu plantilla. En esta línea, contar con soluciones que certifiquen la identidad de los usuarios mediante contraseñas fuertes, métodos de autenticación multifactor (MFA) o monitorizar la presencia de las credenciales en la dark web es una manera eficaz de evitar que ciberdelincuentes accedan a cuentas de tus empleados y clientes.
● Monitoriza el cifrado web https: a pesar de que el cifrado de sitios web está pensado para la seguridad de estos, cada vez son más los agentes maliciosos que logran acceder a webs cifradas. Por este motivo, se recomienda monitorizar el estado de las webs encriptadas para cerciorarnos de que son espacios seguros para los usuarios y no poner en riesgo sus dispositivos o sus datos.
● Prioriza un sistema de ciberseguridad unificado: los vacíos en ciberseguridad pueden facilitar el robo de datos por parte de agentes maliciosos. En este punto, confiar en un sistema de ciberseguridad que proteja las posibles vulnerabilidades de la organización para que, de esta forma, los datos queden blindados de manera más efectiva y protegidos de posibles ataques.
Los datos son información valiosa para las compañías y los usuarios, sin embargo, para los ciberdelincuentes lo es aún más por ser una fuente de ciberataques. En el caso de sufrir un robo de datos de terceros supondría no solo un gran daño a la reputación corporativa, sino graves consecuencias legales y económicas que pueden repercutir seriamente al futuro de tu compañía.
Es importante abordar la protección de datos en profundidad y aplicar un protocolo de ciberseguridad integrado y actualizado que blinde toda información sensible que posea tu organización, ya sea de terceros o propios.