En 1995, el autor Daniel Goleman publicó su best-seller “Inteligencia Emocional”. En él argumenta que las habilidades no cognitivas pueden ser tan, o más, importantes que el coeficiente intelectual. Una investigación adicional confirma que las personas con los coeficientes intelectuales más altos superan a los que tienen un coeficiente intelectual promedio solo el 20% de las veces.
Aún más interesante fueron los datos que demostraron que las personas con un coeficiente intelectual promedio superaron a aquellos con los más altos coeficientes intelectuales el 70% de las veces. Este hecho ilustra cómo la persona más inteligente en la habitación no es necesariamente la mejor para dirigir y gestionar sus equipos de desarrollo o su departamento de TI. “El EQ [IQ emocional] de los directivos es particularmente significativo en el mundo de la TI. Mantener a trabajadores calificados es crítico y los datos sugieren que el EQ del líder afecta la retención”, señaló Adele B. Lynn, fundadora y dueña de The Adele Lynn Leadership Group.
Ya sea que esté hablando de sí mismo o de los gerentes que lideran a sus equipos, la inteligencia emocional es clave para obtener el máximo provecho de sus departamentos de tecnología -muchas veces- faltos de personal, así como la retención de su inversión de capital humano el mayor tiempo posible. De hecho, recientemente, Muriel Wilkins escribió en el blog del Harvard Review: “Los datos que muestran que la inteligencia emocional es un diferenciador clave entre los trabajadores destacados y el resto de la manada es irrefutable. Sin embargo, hay algunos que nunca aceptan la habilidad para sí mismos -o que espere hasta que se hace demasiado tarde”.
¿Qué es la EQ y por qué me debería importar?
¿Por qué esto es importante para usted? Debido a que sus administradores de TI y tecnología son una parte clave de sus estrategias de ejecución y retención; aquellos con una mayor inteligencia emocional ofrecerán mejores resultados en áreas como el liderazgo de equipos, influenciar a personas, conciencia organizacional, la auto-confianza y el liderazgo global.
La buena noticia, señalo Angela Yochem, CIO de BDP International, es que “la gran cosa sobre el campo de la tecnología es que atrae a gente interesante, apasionada, inteligente; y creo que, en general, la misma apertura a nuevas ideas que las atrae, trae la motivación, la integridad y la comodidad con el cambio -todos estos elementos de un alto EQ”.
Cinco componentes de la inteligencia emocional
Hay diferentes escuelas de pensamiento en lo que comprende el coeficiente intelectual emocional, pero de acuerdo con la investigación realizada por The Adele Lynn Leadership Group, cinco componentes conforman lo que consideramos la inteligencia emocional.
Auto control y conocimiento
1. Empatía
2. Pericia Social: Esto incluye vínculos sociales, colaboración, experiencia organizacional y resolución de conflictos.
3. Influencia de sí mismo: Esto incluye competencias como la capacidad de recuperación, la fijación de metas, optimismo y flexibilidad
4. De Otros: Esto incluye competencias como líder a los demás, crear un clima positivo, y la obtención de resultados de los demás.
5. Dominio de propósito: Esto incluye competencias como la comprensión de la finalidad y los valores propios y tomar acciones para vivir el propósito y autenticidad propia.
¿Necesito trabajar en mi inteligencia emocional?
La respuesta corta es sí. Los expertos coinciden en que, como gerente, mientras más comprenda las motivaciones de sus empleados, los planes respecto a sus carreras, y las fortalezas y debilidades de las personalidades, podrá destinar mejor sus recursos y ayudarlos a crecer. Si es realmente bueno, puede ayudar a aquellos compañeros o subordinados a trabajar desde sus fortalezas, mientras que les muestra un camino para mejorar sus áreas de debilidad.
Cuando un empleado tiene una buena relación con su supervisor y esa persona muestra un interés activo por sus sentimientos, ideas y desarrollo de carrera, se vuelve mucho más difícil para los empleados abandonar el barco. Aquí hay cuatro preguntas para reflexionar:
- ¿Se encuentra a la defensiva varias veces?
- ¿Es indiferente o desinteresado con lo que los compañeros de trabajo o subordinados piensan de usted o lo que les interesa?
- ¿Acepta la responsabilidad o no le echa la culpa a los demás regularmente?
- ¿Tiene dificultades para empatizar con sus empleados o compañeros de trabajo?
Si contestó sí a alguna de estas, entonces es probable que necesite mejorar su inteligencia emocional.
La incorporación de inteligencia emocional en su proceso de entrevista
Nuestros expertos están de acuerdo en que no hay una gran cantidad de empresas de tecnología que haga un gran trabajo incorporando la inteligencia emocional en sus procesos de contratación o promoción. De hecho, Walt Meffert, CIO de Hanger.com, un proveedor de servicios de prótesis, señaló, “no puedo decir que siquiera una vez he oído que [la inteligencia emocional] se discute a la hora de tomar decisiones de contratación o promoción en cualquier empresa”.
Yochem está de acuerdo rotundamente, “algunas empresas de tecnología -como las compañías de todos los sectores, con franqueza- se basan más bien en criterios muy estrechos para la contratación y promoción, y estos criterios a menudo no incluyen la inteligencia emocional”, comentó.
Yochem agregó que un problema que desafía regularmente a instituciones que quieren incorporar esta metodología son las diferencias culturales, sorprendentemente. “No contamos con una amplia capacidad de medición hasta el momento -una aspiración se hizo difícil por la diversidad de culturas que tenemos en nuestra empresa global. Las acciones que satisfacen a las personas en una cultura, pueden poner a personas de otras culturas tensas, por ejemplo. Las señales visuales y auditivas que recibimos en nuestras interacciones con la gente de diversas culturas varían mucho en cuanto a significado”, anotó Yochem.
Así que está pensando, “voy contratar a varios nuevos, ¿cómo puedo incorporar esto en mi proceso de entrevistas?” Para ayudar a responder esa pregunta, Lynn ofrece estos consejos y preguntas para ayudarle a añadir un poco de perspectiva de inteligencia emocional a su plan de contratación.
1. Construya preguntas específicas basadas en el criterio de desempeño del EQ que desea evaluar: “Es un proceso que requiere que las empresas elaboren cuidadosamente las preguntas y las respuestas deseadas, teniendo en cuenta criterios clave de inteligencia emocional que se correlacionen con el trabajo”, señaló Lynn.
2. A continuación, pida un ejemplo de comportamiento: “Muchas personas se detienen en este paso. Añadimos dos pasos adicionales, muy importantes”, agregó Lynn.
3. Luego trate de interrogar para averiguar si hay motivo o reflexión: “Esto nos da información significativa sobre bajo qué circunstancias se repetirá el comportamiento”, señaló Lynn.
4. Luego compare las respuestas basándose en sus soluciones predeterminadas.
Lynn también ofrece estas preguntas dirigidas específicamente a los líderes de TI:
- Hábleme acerca de un momento en el que un proyecto bajaba la moral de su grupo. ¿Cómo lo supo? ¿Qué hizo al respecto?
- Hábleme acerca de un momento en el que usted trabajó deliberadamente para establecer el tono en una discusión con un empleado o cliente. ¿Qué dijo? ¿Cómo lo dijo?
- Describa un momento en el que un empleado estaba sufriendo. ¿Cómo lo supo? ¿Qué hizo?
- Hábleme de un momento en el que alguien se oponía a usted o sus ideas. ¿Qué hizo?
- Describa un momento en el que usted se quedó corto al entregar un resultado. ¿Qué hizo?
- Hábleme de un momento en el que un miembro del equipo mantuvo algo en secreto y afectó su trabajo. ¿Qué hizo? ¿Qué dijo? ¿A quién se lo dijo?
- Hábleme de un momento en el que alguien fue crítico con su trabajo. ¿Qué hizo? ¿Qué dijo?
- Hábleme de un momento en el que tuvo una idea y que encontró resistencia. ¿Qué hizo?
- Describa un momento en el que sintió que su carrera se había estancado. ¿Qué hizo? ¿A quién se lo dijo?
- Hábleme de un cliente que le haya hecho demandas poco razonables a usted o su equipo. ¿Qué hizo?
- Hábleme de un momento en el que algo que dijo o hizo tuvo un impacto positivo en su equipo o en un cliente. ¿Cómo lo supo?
- Hábleme de un momento en el que algo que dijo o hizo tuvo un impacto negativo en su equipo o en un cliente. ¿Cómo lo supo? ¿Qué hizo al respecto?
Consejos para mejorar su coeficiente intelectual emocional
Según los expertos, uno de los métodos es pedirles a colegas en los que confía que le den retroalimentación sobre su interacción con los demás. Muchas veces nos vemos a nosotros mismos de cierta manera y otros nos ven completamente diferente.
Cuando es posible, retrase el proceso de tomar decisiones. Todos hemos pasado por ese momento cuando algo sucede en el trabajo que es muy frustrante o realmente satisfactorio, y reaccionamos rápidamente precipitándonos a una conclusión. A veces frenar las cosas ayuda a eliminar algo de emoción del proceso, y en su lugar le permite concentrarse en la toma de decisiones basadas en algo concreto. “Aprendí a desacelerar mi respuesta. No todo es una emergencia. Esto estaba causándole estrés innecesario a mi personal”, señala Lynn.
Lo que funciona para Larry Bonfante, fundador del CIO Bench Coach y CIO of USTA, es “trabajar constantemente en la auto-conciencia y obligarme a ver las cosas a través de la posición de la otra persona preguntándome ¿qué es lo que ellos ganan?”.
¿Formación de IQ emocional para sus gerentes?
Muchas grandes organizaciones de capacitación de liderazgo, como Gartner, por ejemplo, ofrecen algún tipo de materiales o cursos de entrenamiento de inteligencia emocional. Coursera también ofrece cierto tipo de formación gratuita sobre liderazgo motivante a través de la inteligencia emocional. También hay muchos consultores de liderazgo que llevan a cabo este tipo de pruebas de inteligencia emocional para altos directivos. Por ejemplo, la organización de Lynn ofrece cursos de instrucción como evaluación 360 o auto-evaluación, aprender de manera digital y/o en un salón de clases, asesoramiento personal, y la incorporación del coeficiente intelectual emocional en el proceso de contratación a través de su “EQ Interview Process”.
Reflexión Final
“La inteligencia emocional es un efecto multiplicador tanto para el individuo como para el negocio. No puede reemplazar a la excelencia técnica, pero puede multiplicar la ventaja de negocio para la empresa. Y, puede multiplicar la eficacia para el individuo”, indicó Lynn.
Rich Hein, CIO (EE.UU.)