La planeada adquisición del negocio de servidores x86 de IBM por parte de Lenovo por 2,3 mil millones de dólares ha superado un gran obstáculo regulatorio en Estados Unidos, allanando así el camino para que el acuerdo se cierre a finales de año.
El acuerdo ha sido revisado por el Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro, que revisa las transacciones que involucran a dueños extranjeros que puedan afectar la seguridad nacional de Estados Unidos.
En junio, The Wall Street Journal reportó que el acuerdo podría estar en peligro ya que Estados Unidos en ocasiones ha visto con sospecha a las compañías chinas. En octubre del 2012, los legisladores de Estados Unidos aconsejaron al sector privado no comprar equipos de Huawei o ZTE, señalando que los equipos podrían implicar riesgos a la seguridad nacional.
Para aliviar esas preocupaciones, Lenovo lanzó una campaña de relaciones públicas para demostrar que el acuerdo no amenazaría la seguridad de Estados Unidos o los intereses de sus negocios. En el 2005, Lenovo había completado la adquisición del negocio de PC de IB por 1,25 mil millones de dólares, un acuerdo también aprobado por el CFIUS.
Con el permiso del CFIUS, Lenovo e IBM “han completado el proceso regulatorio en Estados Unidos”, afirmó Brion Tingler, vocero de Lenovo en un correo electrónico.
El ministerio de Comercio de China (Mofcom) ya ha aprobado el acuerdo. La transacción también debe ser aprobada por el gobierno canadiense, de acuerdo a Lenovo.
IBM va a privarse de sus activos en servidores x86 pero retiene su línea de microprocesadores y servidores Power8.
Lenovo también está pasando por los pasos regulatorios necesarios para despejar su adquisición por 2,91 mil millones de dólares de Motorola Mobility, que fue anunciada en enero.
Lenovo afirmó que ambas transacciones van a ser finalizadas a fines de año.
Agam Shah, IDG News Service