Para los gerentes de sistemas de TI, tanto en instituciones educativas como en empresas, surge un reto estratégico: ayudar a sus organizaciones a cerrar la brecha entre las competencias técnicas y las habilidades blandas que estas nuevas generaciones necesitan para destacar en el mercado laboral. Esto requiere no solo identificar y sugerir las herramientas tecnológicas adecuadas, sino también fomentar espacios digitales que promuevan el aprendizaje continuo y el desarrollo integral.
La tecnología como puente hacia el aprendizaje integral
Una encuesta a estudiantes de la Generación Z destaca que su principal prioridad al evaluar posibles empleadores es adquirir habilidades que impulsen sus carreras en el trabajo, pasando del 67% en la encuesta de 2022, al 86% en la de 20242. Si se considera que, a largo plazo, el 75% del éxito laboral depende de las habilidades blandas, frente a solo un 25% vinculado a las habilidades técnicas o cognitivas; entonces, es fundamental que las instituciones educativas y las empresas respondan a estas demandas.
Al respecto, D2L, plataforma de aprendizaje en línea, recomienda que las instituciones educativas diseñen programas que integren conocimientos teóricos y técnicos con la formación en habilidades blandas para garantizar una preparación integral para el futuro profesional de sus estudiantes; y en el caso de las empresas, es importante promover un aprendizaje continuo integral que considere, también, el desarrollo de las soft skills.
Aquí es donde las áreas de TI juegan un papel fundamental. En las instituciones educativas, la implementación de plataformas digitales de aprendizaje que simulen los entornos laborales y fomenten el desarrollo de habilidades blandas puede ser clave para preparar a los estudiantes para los desafíos del siglo XXI. Herramientas como LMS (Learning Management Systems), simuladores interactivos y aplicaciones de colaboración pueden crear un entorno de aprendizaje que motive a los estudiantes a desarrollar competencias tanto técnicas como personales.
Por su parte, en las empresas, las áreas de TI tienen la misión de identificar y sugerir tecnologías que faciliten el aprendizaje continuo de sus colaboradores. Plataformas de aprendizaje en línea, herramientas de gestión de proyectos y aplicaciones que promuevan la retroalimentación efectiva pueden ser grandes aliados para cerrar estas brechas y mejorar la productividad del personal.
El rol clave de ti en la transformación del aprendizaje
Las áreas de TI deben liderar la adopción de sistemas que impulsen el aprendizaje continuo. Esto implica una colaboración estrecha con las áreas de recursos humanos y con los líderes educativos para diseñar programas que integren tecnología y metodologías pedagógicas innovadoras.
Plataformas de aprendizaje, como los sistemas LMS, ofrecen un enfoque estructurado y flexible para fomentar el desarrollo de habilidades blandas en los colaboradores y estudiantes. Estas plataformas en línea permiten crear entornos de aprendizaje personalizados, donde los usuarios pueden practicar competencias como la comunicación, la colaboración y la resolución de problemas en un formato digital interactivo. Entre los principales beneficios de esta tecnología educativa, D2L, plataforma de aprendizaje que digitaliza la experiencia educativa, señala:
Personalización del aprendizaje: Los LMS permiten diseñar itinerarios formativos adaptados a las necesidades específicas de cada usuario, asegurando que tanto estudiantes como empleados puedan trabajar en áreas que requieren refuerzo.
Inteligencia artificial para un aprendizaje más efectivo: Los LMS más avanzados integran inteligencia artificial (IA) que analiza el progreso y las necesidades de cada usuario, recomendando contenidos personalizados y adaptando los itinerarios formativos en tiempo real. Esto optimiza el proceso de aprendizaje, mejora la retención de conocimientos y asegura que los usuarios adquieran habilidades relevantes de manera más eficiente.
Simulaciones y aprendizaje basado en escenarios: Muchas plataformas de aprendizaje incluyen módulos que simulan situaciones del mundo real, permitiendo a los usuarios practicar habilidades como la toma de decisiones o la gestión de conflictos en un entorno seguro.
Colaboración y trabajo en equipo: A través de herramientas integradas como foros, chats y proyectos colaborativos, los LMS promueven el trabajo en equipo, una competencia crucial en cualquier organización moderna.
Seguimiento y retroalimentación en tiempo real: Los gerentes y educadores pueden monitorear el progreso de los usuarios y proporcionar retroalimentación inmediata, ayudando a reforzar el aprendizaje de manera efectiva.
Acceso flexible y continuo: Los LMS permiten a los usuarios acceder a contenidos desde cualquier lugar y en cualquier momento, promoviendo el aprendizaje autónomo y la adaptabilidad a horarios laborales o escolares.
La Generación Z tiene el potencial de transformar las organizaciones y el entorno educativo con su habilidad técnica y su familiaridad con la tecnología. Sin embargo, esto solo será posible si reciben el apoyo necesario para desarrollar habilidades blandas que complementen su perfil profesional. Las áreas de TI están en una posición privilegiada para ser los impulsores de este cambio, proporcionando las herramientas y estrategias necesarias para preparar a esta generación para el futuro.