A pesar de que el potencial de la computación en la nube es impresionante, la amplitud y profundidad del impacto así como el nivel de adopción en el tiempo son inciertos y se requieren revisiones frecuentes de la estrategia que esté adoptando la empresa en cada caso.
En este sentido, Gartner identificado cinco tendencias sobre el cómputo en la nube que se están acelerando y que pueden llegar a suponer un punto de inflexión en los próximos tres años, por lo que los usuarios deben tenerlos en cuenta en sus procesos de planificación de su migración a la nube.
Por ejemplo, la nube trae consigo una gran cantidad de beneficios como menores costos, mayor agilidad y una escasa complejidad, además de orientar los recursos a las áreas de mayor valor añadido al mismo tiempo que se reducen los riesgos. Sin embargo, estos beneficios potenciales deben ser examinados cuidadosamente y comparados con los desafíos y amenazas existentes, incluida la seguridad, la falta de transparencia, la preocupación por el rendimiento y la disponibilidad, las restricciones en la concesión de licencias y las necesidades de integración. Estos problemas crean un entorno complejo en el cual evaluar las ofertas individuales de cada nube.
Gartner señala en segundo lugar que la computación híbrida es un imperativo actualmente. La nube híbrida se refiere a la coordinación y combinación de servicios externos de computación en nube (pública o privada) y de la infraestructura interna de la empresa. Con el tiempo, la computación en la nube híbrida podría dar lugar a un modelo unificado en el que hay una sola nube formada por varias plataformas de nube que se puedan utilizar, según sea necesario, en base a los cambiantes requisitos empresariales. Gartner recomienda que las organizaciones se centren en el corto plazo y tengan en cuenta que cuando las aplicaciones se ejecuten en infraestructuras de nubes públicas las directrices y normas que se establezcan para establecer cómo estos elementos se combinan con los sistemas internos para formar un entorno híbrido coherente y que ofrezca un buen rendimiento.
Facilitar el consumo
A medida que prolifera la adopción de las nubes, también lo hace la necesidad de asistencia. Una intermediario de servicios cloud (MMS) es un proveedor de servicios que desempeña un papel de intermediario en la computación en nube. El interés en este concepto aumentó el año pasado y Gartner espera que esta tendencia se acelere en los próximos tres años, a medida que más personas consuman servicios en la nube sin la participación del departamento TI.
Las empresas tampoco deben olvidarse de buscar primero la oportunidad de migrar cargas de trabajo existentes a una infraestructura de aplicaciones en la nube. Este enfoque puede proporcionar beneficios cuando se tiene una necesidad de recursos muy variable. Sin embargo, para explotar plenamente el potencial de un modelo en la nube, las aplicaciones deben ser diseñadas con las características, limitaciones y oportunidades de un modelo de nube en la mente. La consultora recomienda a las empresas mirar más allá de la migración de las cargas de trabajo de la organización para la creación de aplicaciones en la nube optimizadas que aprovechen al máximo el potencial de la nube para entregar aplicaciones de clase mundial.
Futuro de los CPD y modelos operativos
Con el modelo cloud, la organización actúa como un consumidor de servicios, estando en manos del proveedor TI todos los sistemas y centros de datos. Sin embargo, en la medida en que la organización siga construyendo sus propios centros de datos. Gartner recomienda que las organizaciones apliquen los conceptos de la computación en la nube al centro de datos del futuro y las inversiones en infraestructura para aumentar la agilidad y eficiencia.