Cada vez son más las organizaciones que están adoptando el trabajo remoto como una modalidad permanente en sus estrategias, reexaminando la estructura y rol de sus entornos de oficina para mantener a sus empleados seguros y productivos, al tiempo que se habilita una mayor agilidad para el desarrollo de los procesos de negocio.
A través de las experiencias virtualizadas, las compañías de cualquier tamaño pueden adaptarse a esquemas más flexibles, brindando a su personal alternativas para migrar a entornos digitales.
De acuerdo con información proporcionada por Microsoft, dicha dinámica también impacta en la gestión operativa, “al promover herramientas que faciliten la administración, fortalezcan la protección de los activos y garanticen la disponibilidad de la información sin importar el dispositivo desde el que se acceda, cumpliendo los principales lineamientos de seguridad, legalidad y respeto”.
Una plataforma integral para VDI
Esta compañía propone soluciones como Windows Virtual Desktop, un servicio integral de virtualización de escritorio y aplicaciones que se ejecuta en la nube, mediante el cual las organizaciones pueden centralizar y simplificar las tareas de gestión, contando con una plataforma integral que les proporciona la visibilidad, agilidad y eficiencia que demandan los negocios digitales.
Utilizar un escritorio virtual ayuda a fomentar el trabajo seguro de los colaboradores en cualquier lugar, desplegando características avanzadas de VDI (Virtual Desktop Infrastructure) como Windows 10 para sesiones múltiples, optimizaciones de Aplicaciones de Microsoft 365 para empresas y compatibilidad con entornos de los Servicios de Escritorio Remoto (RDS). “A través de estos beneficios, las empresas pueden contar con un ambiente de nube de alta disponibilidad, así como aplicaciones más rápidas y que se adaptan a las necesidades de su carga de trabajo, apalancándose una solución escalable y flexible, bajo un modelo de suscripción”.
¿Y cuál es el mayor diferenciador que aporta?
Aprovechando las características de disponibilidad, velocidad y flexibilidad, los negocios pueden tener a su alcance los instrumentos clave para competir en un mercado que apuesta cada vez más por la digitalización, replicando las experiencias tecnológicas que usuarios y consumidores ejercen en su vida diaria.
En ese sentido, según Microsoft, el diferenciador recae en asegurarse de que los líderes de las organizaciones y los responsables de equipo dentro de las mismas tienen las habilidades, así como el espacio y tiempo suficiente para llevar a cabo el cambio puede marcar una gran diferencia al hacer a sus empleados más productivos e innovadores.
Considerando este escenario, existen proyecciones que estiman que 50% de las operaciones de TI empresarial se ejecutarán desde el borde para 2023[1]. Si bien esta migración es un proceso paulatino, que parte de una estrategia más amplia de transformación digital en las empresas, la virtualización ha mostrado una curva de adopción progresiva en los últimos años, detonada en gran medida por las crecientes demandas de administración remota.
Otro de los beneficios del uso de escritorios virtuales es la reducción de costos al agrupar recursos de varias sesiones.
Al respecto, Microsoft destaca la nueva capacidad de múltiples sesiones de Windows 10 Enterprise diseñada para el rol de Windows Virtual Desktop y Remote Desktop Session Host (RDSH) en Windows Server, mediante la cual es posible reducir la cantidad de máquinas virtuales y la sobrecarga del sistema operativo (SO), además de proporcionar los mismos recursos a sus usuarios además de la propiedad individual a través de los escritorios personales.
De la misma manera, el host puede asignar y conectar usuarios a sus escritorios virtuales. Una vez determinados, los usuarios pueden iniciar cualquier cliente de Windows Virtual Desktop para conectar a los usuarios con sus escritorios y aplicaciones de Windows publicados y conectarse desde cualquier dispositivo a través de una aplicación nativa en su dispositivo o el cliente web HTML5 de Windows Virtual Desktop.
“A medida que las organizaciones ponen en acción a la transformación digital, en particular en estos tiempos de cambio, es necesario considerar las implicaciones de la tecnología. Microsoft está comprometido con compartir los aprendizajes clave y ayudar a las empresas desarrollando infraestructura de vanguardia para construir mejores sistemas que ayuden a las organizaciones a lograr más”, manifestó la compañía.
