La aceleración de la digitalización que ha provocado la pandemia del Covid-19 va a provocar una serie de consecuencias en los próximos años. Entre otras cosas, el aumento de la presencia de robots va a destruir 85 millones de puestos de trabajo en empresas medianas y grandes durante los próximos cinco años según un estudio del Foro Económico Mundial (FEM).
“La COVID-19 ha acelerado la llegada del futuro del trabajo”, comentó la directora general del FEM, Saadia Zahidi. En este contexto, los trabajadores que conserven su puesto de trabajo, también experimentarán cambios, y casi la mitad se verán obligados, en los próximos cinco años, a aprender nuevas habilidades.
Las cifras dicen que en general, la creación de empleo se está ralentizando y la destrucción de puestos de trabajo se está acelerando, ya que las empresas de todo el mundo utilizan la tecnología en lugar de personas para la entrada de datos, la contabilidad y las tareas de administración.
“Los trabajadores que conserven su puesto de trabajo, también experimentarán cambios, y casi la mitad se verán obligados, en los próximos cinco años, a aprender nuevas habilidades”
Pero no todo son malas noticias para los trabajadores, al tiempo que unos se destruyen, surgirán otros nuevos. Según el FEM surgirán más de 97 millones de puestos de trabajo en toda la economía de la atención, en industrias tecnológicas como la inteligencia artificial (IA), y en la creación de contenidos. “Las tareas en las que los seres humanos están llamados a conservar su ventaja comparativa incluyen la gestión, el asesoramiento, la toma de decisiones, el razonamiento, la comunicación y la interacción”, declaró Zahidi.
Así, todo indica que va a producirse un aumento de la demanda de trabajadores que puedan ocupar puestos de trabajo en la economía verde, datos de vanguardia y funciones de IA, y nuevos papeles en ingeniería, computación en nube y desarrollo de productos.
-IDG.es