Koin, empresa en prevención de fraude, dio a conocer su más reciente estudio, “El impacto del fraude online”, desarrollado en colaboración con Gmattos, el cual revela datos clave sobre el verdadero costo del fraude digital en el comercio electrónico de América Latina, con especial énfasis en México, uno de los mercados más impactados.
Según el estudio, dentro del total de ventas online en Latinoamérica, destaca Brasil con una cuota del 55%, seguido de México con un 17%, Colombia (9%), Chile (7%) y Argentina y Perú (ambos con un 6% cada uno). Sin embargo, la región también presenta algunos de los índices más altos de fraude digital en el mundo. Por ejemplo, Brasil, con 3.5%, y México, con un 2.8% muestran tasas de chargebacks por fraude que superan hasta 7 veces las observadas en mercados como Alemania o EE.UU.
En México, las tarjetas de crédito y débito representan el 41% del volumen de operaciones en compras online, seguidas por las tarjetas de débito con un 38%. Frente a este escenario, muchos comercios optan por reglas de prevención estrictas, pero mal calibradas, que sacrifican conversión y ventas legítimas.
El estudio estima que el fraude digital representa en promedio el 1.9% de los ingresos totales de un e-commerce en LATAM. Esta cifra incluye pérdidas por fraude consumado, inversión en herramientas antifraude y, sobre todo, el costo de rechazos indebidos. Para ponerlo en perspectiva: la tasa de fraude que Koin mantiene entre sus clientes es de solo 0.10% —casi 20 veces menor—, con un índice de rechazo del 1.5%. Esta diferencia puede representar millones en ingresos recuperados para los comercios.
Además, el estudio muestra que mejorar la conversión en tan solo 5 puntos porcentuales puede aumentar la rentabilidad de un negocio online hasta un 50%, mientras que reducir a la mitad las pérdidas por fraude puede incrementar la utilidad hasta en un 30%. En otras palabras, la prevención de fraude bien ejecutada no es solo defensa: es crecimiento.
“Las soluciones antifraude mal calibradas generan un doble perjuicio: no solo permiten que el fraude ocurra, sino que también rechazan a clientes reales. La clave está en aplicar tecnología que aprenda del comportamiento, no solo de las amenazas. Esto no es solo seguridad: es eficiencia y crecimiento”, señaló Dieter Spangenberg, Chief Head de Fraude de Koin.