Según Gartner, el año pasado el sector TI vivió su peor caída desde que la firma iniciara el seguimiento del gasto tecnológico de las compañías a nivel mundial. Para 2016 prevé un gasto total cercano a los 3.54 mil millones de dólares, es decir, un 0.6% más que en 2015.
Sin embargo, el gasto en servicios TI registrará un incremento en 2016, tras un descenso de 4.5% el año pasado. En cifras, alcanzará los 940 millones de dólares este año, lo que supondrá un incremento del 3.1% con respecto al periodo anterior.
No obstante lo anterior, en servicios de telecomunicaciones la inversión global proyectada por Gartner sufrirá un retroceso del 1.2% durante este año, con una cifra de gasto global que rondará los 1.454 mil millones de dólares.
El segmento de los dispositivos (que comprende PC, ‘ultramóviles’, smartphones, tablets e impresoras) se espera que caiga un 1.9% a lo largo de este año, un hecho que, según el informe de Gartner, estará propiciado por la combinación de las condiciones económicas de contención del gasto en países como Rusia, Japón, y Brasil, junto con un cambio de tendencia a la baja en la facturación telefónica, como consecuencia de la aparición de mercados emergentes que ofrecen móviles de bajo costo; una situación que solapa la adopción de móviles por el de tablets en regiones donde se esperaban mayores crecimientos de los smartphones.
Gartner apunta a los dispositivos ‘ultramóviles’ premium como los elementos que conducirán el crecimiento en el segmento PC hacia equipos con sistema operativo Windows 10 y chips Intel Skylake.
Asimismo, los analistas de la firma prevén que el gasto en sistemas para el centro de datos se elevará hasta los 75 mil millones de dólares en 2016, un 3% por encima del gasto registrado el pasado año, en el que el mercado del servidor registró una demanda superior a la prevista, procedente del sector de la hiperescala, que ha tardado más en arrancar de lo esperado.
En 2015 el sector facturó 216 mil millones menos que en 2014, y los niveles de gasto alcanzados ese año no se recuperarán hasta 2019. Gran parte de la culpa se debe a la fortaleza del dólar, que ha impactado en los ingresos de las multinacionales estadounidenses. Gartner pronostica que este problema desaparecerá en 2016 y eso les permitirá facturar un 5% más.