La economía digital supone un modelo de negocio basado en la hiperconectividad y abre un nuevo entorno en el que los ciudadanos han cambiado sus hábitos y patrones de comportamiento, y que está transformando el mundo de los negocios. El estudio Economía Hiperconectada, realizado por The Economist Intelligence Unit y SAP, recoge como estamos ante una evolución que las empresas deben entender y a la que han de adaptarse para pervivir en sus mercados, y ser capaces de satisfacer las necesidades de los nuevos perfiles de clientes.
Un 57% de los encuestados ha identificado un mayor nivel de competencia en aquellas compañías que, estando ya establecidas en el mercado, han apostado por nuevas ofertas digitales, que en las empresas recién creadas (start ups). Y es que, tal y como subrayó un 86% de los encuestados, la economía digital representa una extraordinaria oportunidad para el desarrollo de su negocio (el 59% de las empresas consideró que para poder subsistir necesitan estar preparadas y adaptarse al nuevo panorama digital).
El 50% de los encuestados consideró que la continua evolución del ecosistema actual empresarial supondrá que los productos y servicios se personalicen y adapten cada vez más a las necesidades individuales de los clientes. Una de las consecuencias más importantes de la hiperconectividad, según el 39% de los consultados, es que los nuevos canales digitales han permitido un contacto más directo entre clientes y empleados, transformando las actividades comerciales.
La unión entre Internet, la tecnología móvil e Internet de las Cosas les está permitiendo identificar con mayor facilidad nuevos mercados en los que poder operar, lo que aumenta sus posibilidades de internacionalización, según el 41% de las organizaciones encuestadas. Las empresas están buscando proveedores y clientes en nuevas ubicaciones geográficas y, para el 38% de los encuestados, el nuevo modelo de negocio digital y global ha mejorado su capacidad para trabajar con proveedores internacionales.
Además, el 39% ha introducido cursos de formación en capacidades digitales para sus empleados con el objetivo de hacer frente a las necesidades existentes en el panorama actual. También está cambiando la organización del trabajo, la misma proporción de empresas (el 39%) afirmó que han adoptado técnicas para un desarrollo y/o gestión ágil de los proyectos.
Uno de los principales impactos de la Economía Digital es la progresiva aceleración de los procesos de negocio, lo que según el 46% de los encuestados llevará a su automatización. En definitiva, las empresas consideraron que el nuevo entorno hiperconectado ayudará a que sean más ágiles e innovadoras y que tengan un control menos centralizado.
– CIO