La omnipresencia de las Tecnologías de la Información y la Comunicación está llevando a grandes cambios en todos los aspectos de las organizaciones, incluyendo aquellos en las actuales estructuras de los departamentos de TI, no preparados para abordar de forma efectiva los nuevos retos tecnológicos y la necesidad de adaptarse en tiempo real a los cambios del negocio.
Así lo asegura un estudio publicado por Gartner, que revela cómo el uso intensivo de las capacidades y servicios TI en tareas que están íntimamente unidas al éxito del negocio es necesario contar con líderes de los programas de administración de portafolios de TI (PPM) que sepan hacer frente a los constantes cambios del entorno del negocio.
“El nivel de incertidumbre y de cambio está en su punto más álgido. La fuerza de este cambio y de incertidumbre requiere de los líderes de PPM un constante ajuste y reajuste de los roles organizacionales, las capacidades y la mentalidad de las estructuras para tener éxito dentro de la continua evolución de la nueva normalidad”, explicó Robert Handler, vicepresidente y analista de Gartner. “La constante innovación y el cambio son necesarios si las organizaciones quieren responder al interés y exigencias planteadas por las partes interesadas y los patrocinadores”.
Gartner destacó además que para 2016, 20% de los departamentos de TI con negocios intensivos se plantearán cambiar hacia modelos de análisis de la cartera de TI en tiempo real como forma de cerrar la brecha entre las necesidades del negocio para el cambio rápido y frecuente y los nuevos productos, servicios y tecnologías de TI que puedan responder de forma dinámica a esos cambios (incluyendo la nube y la virtualización).
También en ese año, Gartner predice que la demanda de los líderes hacia proyectos ágiles de fusión y cambio de competencias de administración con experiencia en el campo se incrementará en 75% con respecto a las exigencias actuales. Y es que las tasas de fracaso de estos proyectos son altas y la causa más frecuente de fracaso del proyecto es la incapacidad para ofrecer la funcionalidad necesaria con la suficiente rapidez para aprovechar las oportunidades del mercado. El liderazgo transformacional y la experiencia en el campo deben estar estrechamente unidas a la administración de proyectos para prosperar en la nueva realidad que está por venir.
Asimismo, en 2015, 80 por ciento de las organizaciones de TI llegará a un punto en que podría producirse una crisis en la disponibilidad de sus recursos, bajo una intensa presión para ofrecer los recursos adecuados para el proyecto justo a tiempo. Impulsado por la necesidad de ofrecer casi en tiempo real proyectos de cambio y ante una incapacidad general para gestionar los recursos necesarios para lograr ese cambio, las organizaciones se verán obligadas a cambiar la forma en que los recursos del proyecto son asignados y administrados.