Microsoft ha endurecido sus criterios de clasificación de adware, y da tres meses a los desarrolladores para que cumplan con sus nuevas normas, bajo el riesgo de ver bloqueados sus programas por productos de seguridad de la firma a partir del 1 de julio. Antes se ejecutaban los programas hasta que el usuario elegía una de las acciones recomendadas por su software de seguridad.
Curiosamente, esta ofensiva de Microsoft contra el adware coincide con la introducción de nuevas herramientas para desarrolladores que permiten incorporar anuncios en Windows 8.1 y Windows Phone. El caso es que se cambian los criterios a la hora de clasificar las aplicaciones como adware, para cumplir el principio de que el usuario debe poder elegir y controlar lo que ocurre en su computadora, según sostiene Michael Johnson, miembro del Malware Protection Center de Microsoft.
Para empezar, sólo se evaluarán como posibles aplicaciones adware no deseado aquellas que desplieguen publicidad de productos y servicios que estén incluidas en otros programas, como navegadores, y si la publicidad no se sale de sus fronteras, no será evaluada.
Para evitar ser bloqueado como adware, los programas cuyos modelos de ingresos incluyan publicidad, deben solo mostrar anuncios o grupos de anuncios que tengan un botón de cierre evidente. Además, los anuncios deben indicar claramente el nombre del programa con que se ha generado.
Los programas también deben proporcionar un método estándar para ser desinstalados en el panel de control de Windows o en la interfaz de gestión del navegador, si el anuncio funciona como extensión de éste o en la barra de herramientas.
“Creemos que va a ser más fácil para los desarrolladores de software que utilizan publicidad y, al mismo tiempo, permitirá al usuario mantener el control”, resume el experto del centro de seguridad de la compañía.
Este tipo de anuncios afectan seriamente a la navegación del usuario, resultan en ocasiones molestos y difíciles de desinstalar por completo. El proveedor de antivirus Avast considera las barras de herramientas del navegador y las extensiones como los mayores problemas de los usuarios al respecto durante 2013. Algunas de estas barras son incluso imposibles de desinstalar completamente, ya que cambian sus nombres e identificadores en cada computadora.
– Lucian Constantin, CSO