Los casos de robo de contraseñas y de identidad van en aumento cada vez más, ello nos lleva a pensar en el uso de nuevas tecnologías -como la autenticación biométrica- que en un futuro cercano permitirán evitar este tipo de situaciones.

Pedro Lara, experto en Innovación para América Latina de Gemalto, explicó que, “la innovación es un herramienta que tenemos a nuestro favor para incrementar rápidamente la confianza en el ciberespacio y la vida digital de las personas, estando siempre un paso adelante de los ´ciberdelincuentes´ que están igualmente en constante evolución”.

Un entorno en el que se debe librar la batalla ante el robo de información, espionaje e incluso el secuestro (ransomware) es el mundo móvil, ya que estamos cerca de 5,000 millones de suscriptores en todo el mundo. De los cuales, aproximadamente 2,000 millones son usuarios de teléfonos inteligentes que acceden a información valiosa y personal cada día.

Con la finalidad de proteger a los usuarios y el acceso a su información, recientemente se ha tenido un gran avance el desarrollo de la autenticación biométrica (a pesar de que la biometría no es un concepto particularmente nuevo). De hecho, el reconocimiento de huellas dactilares se ha convertido en la forma preferida para el desbloqueo de teléfonos inteligentes desde que debutó en 2013, y se espera que los envíos globales de teléfonos inteligentes con sensores de huellas dactilares lleguen a las 1,082,000,000 unidades para 2018.

Pero las innovaciones no están solo en la palma de la mano, sino que se están centrando en otras áreas del cuerpo, como el reconocimiento facial que se perfila a seguir creciendo este y el próximo año, el escaneo del iris, el reconocimiento de voz y la Biometría de Comportamiento, entre otros. “Los movimientos de tu cuerpo o cómo usas tus manos al firmar con un bolígrafo, introducir una clave en tu móvil y banca digital o simplemente al escribir un texto en tu computadora, son únicos e irrepetibles para cada persona. Tu comportamiento es un rasgo personal y por tanto biométrico”, dijo Lara.

Y a pesar de los debates sobre la autenticación biométrica y cuestionamientos como por ejemplo, ¿qué pasa si una huella dactilar es robada debido a la falta de protección adecuada? Queda claro que uno puede cambiar su contraseña pero no puede cambiar su huella dactilar, las percepciones han cambiado y los temores se están desvaneciendo; de hecho, más de la mitad de una muestra de 1,300 consumidores recientemente encuestados creen que un lector de huellas dactilares en el celular protegería significativamente sus aplicaciones móviles.

La gente, en gran parte, está lista para adoptar la biometría, sin embargo, esto viene con una condición de protección al 100%. La confianza en la seguridad de sus dispositivos móviles es fundamental para los consumidores. De acuerdo con el estudio “Perspectiva de los consumidores en torno a la seguridad de las aplicaciones móviles” de Gemalto, aproximadamente 7 de cada 10 consumidores estarían dispuestos a usar documentos de identidad digital en su teléfono si se les garantizara la seguridad. Pedro Lara explicó que “métodos innovadores de Protección en el móvil pueden ser integrados en el corazón de la aplicación de manera nativa e incluso al interactuar en un navegador, procurando siempre un bajo o nulo nivel de intrusión para el consumidor y garantizando no solo la confianza sino una mayor relevancia en su experiencia digital”.

Cuando los consumidores se percaten de que la infraestructura de seguridad global está implementada para los celulares y que la autenticación biométrica es segura, veremos una adopción incluso más generalizada de la que vemos hoy en día.