La alarma mundial que ha generado el coronavirus ha provocado que miles de empresas en todo el globo hayan implantado el teletrabajo como medida excepcional y transitoria mientras se trata de paralizar la expansión de la infección. Esto supone que toda esa fuerza laboral tenga que hacer gala de dispositivos móviles para realizar su actividad diaria, lo que, a su vez, supone un reto de ciberseguridad para las compañías. En otras palabras, el coronavirus podría mejorar la ciberhigiene de las corporaciones y dejar un camino de buenas prácticas.
Desde el punto de vista de la protección de datos, el teletrabajo aumenta significativamente las posibilidades de que se cree cierta propiedad intelectual fuera de los servidores centrales de las oficinas. Esto quiere decir que muchas organizaciones deberán revisar sus políticas al respecto. Y, es que muchas de ellas no proporcionan respaldo y recuperación (backup) de dispositivos móviles, a pesar de que la mayoría de los analistas así lo aconsejan.
Una de las razones por la que pueden fallar los intentos de copias de seguridad de los equipos portátiles es que a los usuarios les puede no interesar ya que el proceso puede ser demasiado lento y costoso. En cualquier caso, muchos proveedores ya ofrecen este tipo de servicios de una manera ágil y sin que el propio empleado se dé prácticamente cuenta.
Por otra parte, una alternativa común a la copia de seguridad puede ser la utilización de un sistema centralizado de comunicación y colaboración. Pero, los empleados deben estar capacitados en buenas prácticas para que todos los datos se almacenen en estas aplicaciones en lugar de en el dispositivo portátil.
En el peor de los casos, si se produce una brecha de datos, y el personal de TI no puede administrar físicamente el centro de datos, la compañía podría tener serios problemas en su capacidad de respuesta; la mayoría de los sistemas tradicionales requieren presencia física. Para no llegar a este punto, existen servicios de recuperación ante desastres totalmente automatizados en la nube.
–CIO España