Todos los días nos enteramos sobre nuevas formas en las que la tecnología ‘wearable’ de productos de consumo médicos puede tener un impacto positivo en nuestras vidas y mejorar nuestra salud y bienestar. Desde monitores de frecuencia cardíaca que podrían usarse para detectar COVID-19 de larga duración hasta pulseras que ayudan a predecir la ovulación y concepción.

Pareciera que los consumidores en México tienen un apetito insaciable por la tecnología de los wearables. Lo que trae consigo una gran oportunidad para los proveedores de este tipo de tecnologías, gracias a temas coyunturales relacionados al COVID-19, el despliegue de la conectividad 5G y las respuestas de los consumidores a las mejoras en el alcance y la eficacia de este tipo de dispositivos.

De acuerdo con los especialistas, se prevé que el mercado mundial de wearables para el cuidado de la salud crezca de 16,200 millones de dólares en 2021 a 30,100 millones de dólares para 2026. Además, según Deloitte, se enviarán 320 millones de dispositivos médicos wearable de consumo a nivel mundial en 2022.

Al respecto, Cisco AppDynamics efectuó una investigación que explora las actitudes y comportamientos de los consumidores en relación con la tecnología wearable.

Los resultados en México muestran que más del 90% de los entrevistado creen que la tecnología wearable ahora tiene el potencial de transformar positivamente tanto su salud personal como los servicios de salud pública.

Siguiendo en esta línea, 36% de los mexicanos entrevistados afirmó que ya está usando al menos un dispositivo wearable y el 88% planea aumentar el uso de tecnologías wearable y sus aplicaciones asociadas en los próximos 12 meses.

Los resultados del estudio muestran la tendencia global de la gente por buscar este tipo de dispositivos y aplicaciones para gestionar y mejorar su salud y bienestar.

En el caso particular de los consumidores de nuestro país, la compañía descubrió que el 87% de los participantes están interesados en cómo la tecnología de la salud, incluidos los dispositivos wearables, puede ayudar a controlar condiciones de salud crónicas o continuas, mientras que el 91% desearía identificar con estas soluciones, las señales de advertencia tempranas de enfermedades graves como el cáncer.

El potencial de la tecnología wearable para desempeñar un papel fundamental tanto en la prevención como en el tratamiento de enfermedades y lesiones es enorme, y el ritmo de innovación dentro del sector sugiere que será uno de los sectores con mayor innovaciones que se harán realidad dentro de poco tiempo.

La experiencia digital, un factor clave

El mercado de tecnologías wearable médicas va más allá que los dispositivos que las personas usan en las muñecas, dedos o en cualquier otra parte del cuerpo. La mayoría de los dispositivos son principalmente vehículos de recopilación de datos que se analizan en un sitio web o aplicación. Actualmente, hay más de 350,000 aplicaciones digitales de salud disponibles para los consumidores, y el 47% se enfoca en el manejo de condiciones de salud específicas.

Las apps son fundamentales para la experiencia que las personas tienen con la tecnología wearable y no importa cuán elegante e innovador sea el dispositivo, el 89% de los mexicanos le da mayor importancia a tener acceso confiable, preciso y en tiempo real a sus datos de salud, es por eso que no tolera las malas experiencias digitales. El 75% reportó que dejarían de usar un dispositivo wearable si tienen una mala experiencia con la app, ya sea con la velocidad de respuesta o en temas de seguridad y privacidad de datos.

¿Cómo cumplir con las expectativas de los clientes?

De acuerdo con Joao Fabio de Valentín, director para Latinoamérica de AppDynamics, el mensaje para las marcas detrás de estas tecnologías y soluciones es claro: “Para mantener cautivo e interesados a los clientes es vital brindarles experiencias digitales perfectas en todo momento”.

Pero ¿cómo se logra esto? Según el directivo, es fundamental que los proveedores de aplicaciones adopten las herramientas necesarias para administrar y optimizar el rendimiento, así como manejar un entorno de TI mucho más complejo. Esto también se puede traducir en implementar soluciones que les permitan mantener una observabilidad en todo su stack tecnológico.

Además, las tecnologías deben poder conectar estos datos de rendimiento de TI con métricas comerciales en tiempo real, de modo que puedan eliminar el ruido de los datos y señalar los problemas que realmente podrían causar un daño grave a la experiencia del cliente y, en última instancia, al negocio mismo, estimó De Valentín.