Un grupo de estudiantes del Tecnológico de Monterrey, campus Toluca y campus Estado de México, desarrollaron el proyecto “Bailando con las Abejas”, que busca sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de estos insectos sociales en los ecosistemas, mediante una experiencia inmersiva que busca combinar arte, ciencia y tecnología.
El jardín captura datos como humedad del suelo, niveles de luz y sonidos emitidos por abejas, para luego procesarlos mediante algoritmos que generan representaciones audiovisuales.
“La IA fue pensada como un traductor entre dos mundos: el humano y el natural. Nos interesa transformar información como la presencia o ritmo de los polinizadores en emociones, en estímulos que nos inviten a sentir, no solo entender”, explicó Maricarmen Barillas, estudiante de ingeniería en tecnologías computacionales (ITC) campus Toluca y Co-Líder de proyecto.
El equipo detrás de esta iniciativa está conformado por estudiantes y docentes de distintas disciplinas como biotecnología, arte digital, ingeniería mecatrónica y ciencias computacionales. Lo integran: Maricarmen Barillas, Cristopher Gálvez, Roberto Leyva, Juan Alvarado, Fernando Ruiz, José Albarrán, Bruno Pacheco, Jocelyn Villaseñor de Campus Toluca y Axel Delgado de Campus Estado de México.
Cada uno de ellos contribuyó en diferentes etapas del desarrollo: desde la arquitectura del jardín y el diseño de sensores, hasta la programación de algoritmos, la creación del entorno audiovisual y el cuidado de las plantas.
Uno de los principales desafíos fue definir qué datos eran los más viables de recolectar. Inicialmente, se planteó grabar los movimientos de las abejas mediante cámaras especializadas, pero los costos y complejidad técnica los llevaron a enfocarse en el registro de audio en entornos controlados. Gracias al apoyo de apicultores y cuidadores de abejas, lograron capturar sonidos en distintas condiciones ambientales, lo que permitió entrenar al sistema con una base más realista.
Por otra parte, el Fondo Creativo 2024, convocatoria nacional impulsada por el Instituto Arte AC para promover propuestas que integren arte, ciencia y tecnología en beneficio de la comunidad, reconoció este proyecto como uno de sus ganadores.
Actualmente, el equipo trabaja en una nueva fase de desarrollo centrada en ampliar la calidad y profundidad del análisis sonoro mediante inteligencia artificial. El objetivo a largo plazo es usar esta tecnología para entender patrones de comportamiento de las abejas y, eventualmente, aplicarla en el sector agrícola, en cultivos como café o aguacate, donde una polinización más eficiente puede mejorar la productividad y sostenibilidad.
“Queremos cambiar la narrativa: que las abejas dejen de verse como plagas y se comprendan como aliados silenciosos en nuestra vida diaria. No se trata solo de conservación, sino de convivencia”, concluyeron los integrantes del equipo.