Windows RT no merece una sola lágrima. El sistema operativo parecía estar destinado a ser el primo pelirrojo de la familia Windows (para alivio de Windows Phone). Pero su sombrío nacimiento y su aún más ingrata infancia no deben enternecernos. Su existencia responde a una inteligente táctica de futuro, aunque hoy las ventas de tablets Windows RT no remonten.
Golpe tras golpe es lo que ha recibido Windows RT desde el principio. Diseñado para equipos móviles basados en procesadores ARM, en vez de x86 de Intel, los Windows RT solo pueden ejecutar aplicaciones específicamente diseñadas para su moderna interfaz de usuario táctil. Los programas de escritorio clásicos simplemente no funcionan.
Pero más allá de las restricciones técnicas, el sistema operativo ha sufrido un nivel asombroso de desidia. La Windows Store, el alma de Windows RT, y su moderna interfaz de usuario siguen sin impresionar. Con pocas aplicaciones estelares para atraer a los usuarios y su incapacidad para ejecutar software de escritorio, no ha logrado impresionar a los consumidores. IDC estima que apenas se han vendido 200 mil dispositivos con Windows RT, en el primer trimestre de este año.
Una tablet con la tienda Windows abierta, asentada en un enorme y vacío espacio, resulta ahora una metáfora visual apropiada del presente de este sistema.
Incapaces de vender tablets Windows RT, algunos fabricantes han suspendido su fabricación. Los desarrolladores tampoco están exactamente alineados con el soporte al interfaz de usuario. Grandes nombres de la industria de los juegos se han dado la vuelta, en cuanto se han asomado a la tienda de Windows. Apple ha desestimado la idea de portar iTunes a Windows 8/RT. Y el sistema operativo fue obviado tanto en el CES, como en Computex o en la propia conferencia de desarrolladores de Microsoft, Build 2013.
Y a pesar de todos estos golpes y de que las tablets dotadas con chips ARM son hasta ahora residuales en el mercado global, ya han supuesto un importante impacto en las tablets Windows en general y su papel solo puede mejorar en el futuro.
“Para Microsoft, Windows RT es un asunto estratégico a largo plazo”, advierte Patrick Moorhead, fundador y principal analista de Moor Insights and Strategy.
Sin embargo, este papel ya está dando resultados en el corto plazo. Parte del éxito de ARM en el ámbito móvil se debe a que los chips que diseña y licencia a los fabricantes son una maravilla en cuanto a eficiencia energética.
La duración de la batería no lo es todo para smartphones y tablets, pero sí una prioridad, sin duda. Y los chips de Intel y AMD tradicionalmente no han sido muy competitivos en este aspecto, aunque en los últimos meses ambos han redoblado sus esfuerzos al respecto.
Pero Windows RT está desempeñando otro papel crucial para el futuro del ecosistema Windows. Gran parte de las discusiones de la conferencia Build 2013, y una parte importante de los esfuerzos recientes de Microsoft, vienen girando en torno a la posibilidad de que los diversos fragmentos del ecosistema Windows hablen entre ellos.
La interfaz de usuario moderna y todas sus aplicaciones se ejecutan sobre la arquitectura de aplicación Windows Runtime/WinRT. No confundir con el sistema operativo Windows RT, porque Windows Runtime soporta varios lenguajes de programación y corre además muy bien en procesadores x86 y ARM.
Si Windows Phone y el desktop Windows unifican cada vez más sus tiendas de aplicaciones, será gracias a la subyacente estructura WinRT. Esto es fundamental. Las futuras aplicaciones serán capaces de correr sobre una gran variedad de hardware, especialmente si Microsoft acerca Windows cada vez más al resto de su ecosistema.
Eso no sólo significa más opciones para los consumidores a largo plazo, sino también más flexibilidad para Microsoft. Teniendo en cuenta que Intel y AMD ya han coqueteado con Android, Windows RT y su arquitectura de aplicaciones WinRT puede ayudar a la firma a construir un futuro con opciones más abiertas.
Ahí radica la genialidad de caballo de Troya de Microsoft. Cada copia de Windows 8 que se vende incluye eso que se denomina interfaz moderna de usuario. Cuantos más usuarios de Windows 8 haya, más desarrolladores querrán colocar sus aplicaciones en la tienda y, como el Windows Store (en su mayoría) ofrece aplicaciones WinRT, en lugar de programas basados en x86 clásicos, Windows RT se hace más fuerte con el tiempo, incluso aunque nadie comprara sus actuales tablets.
– Brad Chacos, PCWorld
