Desde que tomó las riendas de Yahoo hace ahora un año, Marissa Mayer se propuso renovar la compañía y puso en marcha una serie de adquisiciones que es la envidia incluso de sus antiguos compañeros en Google.
En una estrategia que ella misma define como una “serie de sprints”, Marissa Mayer ha adquirido más de una docena de empresas en apenas un año, la mayoría tendentes a lograr su objetivo de liderar la movilidad y recuperar la frescura de una marca que una vez fue la envidia de Silicon Valley, pero que después ha simbolizado todo lo contrario a innovación.
En este tiempo, Mayer ha logrado cierto éxito, sobre todo en el aspecto financiero. Las acciones de Yahoo han subido casi 70 por ciento desde que debutara como CEO el 17 de julio pasado, y los analistas esperan que la compañía anuncie en los próximos días un aumento de 12 por ciento en ganancias trimestrales.
Pero devolver la brillantez a una marca, en los últimos años empañada, no será fácil, a pesar de comprar marcas juveniles como Tumblr y relanzar servicios populares, como Flickr y Yahoo Mails. Así lo creen los analistas que consideran que todavía queda un largo camino antes de que la CEO de la compañía pueda exclamar que ha devuelto el esplendor a Yahoo.
Realmente ahora, “las únicas marcas menos de moda que Yahoo son Microsoft y Dell”, sostiene Eric Gordon, director del Instituto para Emprendedores de la Universidad de Michigan.
Una medida del éxito de un CEO es su impacto en la cuenta de resultados y ahí Mayer puede atribuirse solo parte de crédito. La reputación labrada durante su larga trayectoria en Google, a la que se unió a la compañía en 1999 y pasó por importantes productos de localización y mapeo, debería ser su gran activo.
“Tiene un merecido estatus en Silicon Valley. Creo que ése es uno de los factores que han subido el precio de las acciones en este último año”, destaca Karsten Weide, analista de IDC.
Pero otro de los factores que han impulsado su rentabilidad es su participación en el lucrativo gigante chino del comercio electrónico, Alibabá. “La mayor parte del aumento en el precio de la acción procede de esta participación, por lo que no se puede achacar a la administración de Marissa”, subraya Andreas Pourus, cofundador y director de operaciones de la consultora Greenlight.
Yahoo pagó mil millones de dólares por 40 por ciento de Alibabá en 2005 y vendió la mitad de ella el pasado año. “En el futuro, no se beneficiará mucho más de esta apreciación, lo que en parte explica algunas de las decisiones de Marissa”, explica Pourus.
El plan de Yahoo pasa por destacar en el mundo móvil, atraer a un público más juvenil y convertir sus servicios en algo cotidiano para publicar fotos, ver noticias, correos, precios de acciones o noticias deportivas. Pero no está claro cómo encajan todas las piezas. “No estoy seguro de entenderlo realmente”, exclama Gordon. “¿Un servicio de conferencias gratis? ¿Lo utilizaremos a diario? ¿Recortes de noticias?”, se pregunta.
En todo caso, hay que hacer una gran labor de comunicación y quizás algunas piezas tarden algún tiempo en reportar beneficios a la compañía. Por ello, algunos analistas dan una calificación sobresaliente a Mayer en cuanto a esfuerzo, pero una nota final “aún por determinar”.
– Zach Miners. IDG News Service