En aspectos relacionados con la seguridad tecnológica, los peores casos de la historia puede que se hayan producido en 2014. No obstante, aquí no acaba la cosa; expertos en seguridad afirman que los ataques continuarán a lo largo de este año, en tanto que negocios, gobiernos y legisladores juegan a ponerse al día en ciberataques.
La naturaleza de los ataques también está cambiando, según señala Gemalto, una firma de seguridad digital. Los robos de identidad –los más difíciles de atrapar y detener- se corresponden con las violaciones más habituales, como la acontecida hace pocos días en Anthem. En su informe anual de amenazas, Gemalto afirma que globalmente, los 1.500 incidentes relacionados con brechas de datos que salieron a la luz pública el año pasado afectaron a datos procedentes de más de 100 mil personas. El volumen de registros violados en términos cuantitativos sufrió un incremento de un 75% con respecto a 2013, mientras que los ataques relacionados con el robo de identidad se incrementaron un 23% durante el mismo periodo.
Gemalto recoge los datos de fuentes públicas y, a pesar de la vaguedad de esta clase de datos recolectados, la compañía cree que el informe refleja lo que ocurre año tras año. “Las megabrechas son la tendencia que nos espera en temas relacionados con la seguridad TI, exponiendo con cada ataque a decenas de millones de registros pertenecientes a grandes empresas. El incremento en el robo de identidad es resultado directo del éxito de firmas de servicios financieros a la hora de realizar detenciones rápidas en acciones sospechosas, como los fraudes relacionados con las tarjetas de crédito.
Gemalto apareció con un sistema de clasificación de brechas del 1 al 10, determinado por un algoritmo que medía el impacto en los clientes, en especial si los datos no habían sido encriptados. Dicho ranking midió los ataques perpetrados en Home Depot, JP Morgan Chase e eBay, otorgándoles una calificación de 10 en los tres casos, mientras que al ataque sufrido por Sony, cuya brecha generó un revuelo mediático de alcance mundial por el volumen de contenido digital robado, solo recibió una calificación de 6,5, ya que la peor parte del ciberataque lo recibió la propia compañía.
– Marga Verdú, Network World