Para que México tenga éxito en su “apagón analógico” en televisión requiere de un modelo de política pública que defina los pasos a seguir por el Estado y los concesionarios, señaló el director de espectro del órgano regulador de Reino Unido, Gregory Bensberg.
En el marco de la mesa redonda organizada por Observatel y la embajada de Reino Unido enfatizó que al ser un proceso complejo, la transición digital debe sustentarse en un plan que considere un calendario y acciones a seguir, lo cual dará certidumbre al usuario.
En Reino Unido, que inició el proceso para el “apagón analógico” en 2008, los concesionarios del servicio de televisión financiaron campañas de información al usuario, lo cual significó un incentivo para la adopción de equipos que captan la señal digital.
Aclaró que no existió subsidio por parte del gobierno de ese país, concesionarios ni fabricantes para la compra de equipos decodificadores de señal o televisores, por lo que la información al usuario fue fundamental para impulsar su adopción.
Bensberg refirió que la transición a la televisión digital se realizó mediante un despliegue gradual que inició en el norte, con la división del país en 15 regiones.
Por su parte, la presidenta de Observatel, Irene Levy enfatizó que la digitalización de la tv no sólo conlleva una mejora en la calidad de la imagen sino más alternativas en términos de contenidos y servicios.
Expuso que las autoridades deben dar a conocer la política pública que usarán para concretar el “apagón analógico”, con el fin de evitar adecuaciones de último momento que pudieran afectar el cumplimiento de fechas.
El 2 de septiembre de 2010, el gobierno federal publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto que adelanta al año 2015 el “apagón analógico”, sin embargo, se encuentra suspendido luego de que la Corte de Justicia aceptó dos controversias constitucionales.