Durante años, las empresas y ejecutivos de TI tienen diferencia de opiniones cuando se trata de definir el concepto de agilidad. Para entenderla, primero necesitamos definir lo que significa. Según el concepto proporcionado por Craig Le Chair, vicepresidente de Forrester Research, la agilidad en los negocios es “la cualidad que permite que la empresa adopte los cambios operacionales y de mercado, como una simple cuestión de rutina.”
Una empresa ágil es capaz de manejar con fluidez los cambios a los que se enfrenta en su día a día, aquellos tecnológicos y operacionales, impulsados por las nuevas tendencias del mercado nacional y mundial, así como con los procesos operativos. Cuando la organización cuenta con agilidad es capaz de responder de manera veloz a las amenazas y oportunidades, muchas veces sin perder de vista la posibilidad de hacerlo de una manera sostenible, ya que actualmente muy pocas empresas se encuentran en este nivel y les ofrece no sólo agilidad, sino ventaja competitiva.