IBM y diversas empresas, incluidas Apple, Boeing, Cargill, Dow, PepsiCo y Verizon, se convirtieron en los miembros inaugurales del Consorcio de Clima y Sostenibilidad del MIT (MCSC). Su misión es acelerar la implementación, a gran escala y en el mundo real, de soluciones para abordar la amenaza del cambio climático.
La unión de IBM al Consorcio de Clima y Sostenibilidad del MIT les brinda la oportunidad de trabajar mano a mano con otros líderes para definir las hojas de ruta de la industria para lograr los objetivos de sostenibilidad e identificar las soluciones científicas y tecnológicas para ejecutar esos compromisos. IBM Research está adoptando un modelo de colaboración entre industrias para abordar los problemas complejos y abrumadores que plantea el cambio climático.
El año pasado, IBM Research lanzó una nueva iniciativa global llamada “Futuro del Clima”, con investigadores de sus laboratorios en todo el mundo abocados a desarrollar y demostrar innovaciones para permitir una nube híbrida sostenible, plataformas de IA climáticamente inteligentes y el descubrimiento acelerado de materiales para la captura de carbono.
Una solución de nube híbrida sostenible es aquella que permite a los clientes medir, visualizar y optimizar la huella de carbono de sus cargas de trabajo que se ejecutan en la nube híbrida. Se espera que el consumo de energía del centro de datos crezca a más del 10% del uso de electricidad del mundo para 2030.
IBM Research está innovando en tecnologías que posibilitan la colocación coordinada de contenedores para mejorar la eficiencia energética y la programación dinámica basada en la disponibilidad de energía renovable. En 2020, IBM recibió 3.000 patentes solo en el área de la nube, lo que marca nuestro 28° año de liderazgo en patentes.
Las plataformas de IA climáticamente inteligentes son esenciales para permitir la rendición de cuentas del carbono y la resiliencia empresarial. A medida que los eventos climáticos extremos se vuelven más frecuentes y severos, las empresas deben comprender los riesgos, anticipar los impactos y perfeccionar las operaciones.
Además, las plataformas impulsadas por IA para la contabilidad de la huella de carbono y la optimización de la cadena de suministro consciente del clima requieren innovaciones para el modelado y la predicción precisa del impacto. Por ejemplo, consultas sofisticadas de datos geoespaciales masivos revelan el impacto social y ambiental de la pandemia COVID 19, al mostrar la caída significativa en las emisiones de gases de efecto invernadero como resultado de los cierres regionales en la primavera del hemisferio norte de 2020.
La IA basada en la física permite construir modelos de inteligencia artificial que aprendan las leyes físicas de un sistema para aplicarse directamente al clima. En un trabajo reciente, fue demostrado que la integración de la física con modelos de redes neuronales puede generar modelos robustos y explicables que contribuyen a anticipar y reducir los impactos climáticos. También IBM ha entrenado modelos de IA con datos simulados basados en la física para generar instantáneas de alta fidelidad del sistema climático y construir un modelo IA sustituto de un sistema dinámico complejo, en esencia, aproximaciones rápidas y precisas de simuladores computacionalmente intensivos.