Hoy en día, la tecnología de la información está evolucionando a un ritmo muy acelerado, en gran parte, gracias a la virtualización, la computación en la nube y los grandes volúmenes de datos. Si bien estas tendencias pueden disminuir los costos y aumentar la eficiencia, a menudo, se materializan en productos específicos que ofrecen solo mínimas mejoras para el enfoque tradicional.
Tomemos como ejemplo Data Domain. Aborda el problema del volumen de los datos mediante la simple eliminación de datos duplicados (un enfoque centrado en la infraestructura), pero pierde la oportunidad más grande y estratégica de simplificar e interpretar la información (un enfoque de administración más amplio).