Martín Alejandro Levenson, Coordinador Nacional de Desarrollo Institucional en el Instituto Nacional de Antropología e Historia, define su labor como un vértice entre las funciones operativas y sustantivas del instituto. “Tengo un rol más integrado a la organización, porque a partir de la planeación y la evaluación genero diagnósticos, que a su vez se convierten en procesos de innovación que terminan en la incorporación de tecnologías”, señala.
Junto con Juan Carlos Herrejón, Director de Procesos y Servicios Informáticos del INAH, ha emprendido proyectos como la virtualización de la infraestructura de servidores, la sustitución de conmutadores con telefonía IP sobre sistemas abiertos (Asterisk) y la conformación de una red metropolitana de radiofrecuencia que enlaza las oficinas y recintos dependientes del INAH en la ciudad de México.
Estos tres proyectos, junto con la incorporación de software libre en los servicios electrónicos, han permitido modernizar la infraestructura tecnológica del INAH “con muy pocos recursos, y con medios alternativos muy efectivos”.
En el caso de la virtualización, “hemos comprobado que se puede optimizar la utilización de los recursos de hardware virtualizando los servidores, de manera que hoy podemos brindar respaldos, administración, seguridad y respuesta ante ataques de manera más eficiente. También se pueden asignar direcciones IP y hacer respaldos en forma más sencilla”.
En lo que respecta a telefonía IP, Levenson trabajó con Asterisk en diferentes instituciones gubernamentales, lo que ha permitido que en el INAH sea autosuficiente en cuanto a soporte técnico. Hasta abril de este año, de los 40 conmutadores IP que tiene el INAH, 15 se habían migrado ya a Asterisk, y el proceso continuará conforme los equipos se vayan haciendo obsoletos.
Y en referencia a la red inalámbrica, debido a que el INAH tiene oficinas distribuidas en la Ciudad de México, se optó por aprovechar la experiencia que se tenía para la instalación de redes inalámbricas de radiofrecuencia en varias instituciones gubernamentales. Así, mediante antenas de la marca Ubicuity, de muy bajo costo, se ha podido interconectar a una veintena de edificios que forman una Red de Área Metropolitana (MAN) con velocidades de hasta 150 Mbps. En esta red se ofrecen servicios de telefonía, Internet y acceso a los sistemas institucionales.