Según el Centro Nacional de Seguridad Cibernética del Reino Unido, los servicios de inteligencia militar rusos planeaban un ciberataque para los Juegos Olímpicos de Tokio que se iban a celebrar el pasado mes de agosto y que finalmente fueron aplazados al próximo verano por la pandemia de coronavirus. La causa, apuntan en Gran Bretaña, se puede deber a que los atletas rusos habían sido excluidos de la cita por un escándalo de dopaje masivo entre sus deportistas. Por ello, se sospecha, incluso, que el grupo de ciberdelincuentes estaba dispuesto a paralizar el evento.
Desde Reino Unido aseguran haber encontrado evidencias de un trabajo de reconocimiento, por parte de Rusia, de la organización de los Juegos, los servicios de logística y los patrocinadores. Por su parte, el comité organizador de los Juegos de Tokio ha asegurado no haber observado “ningún impacto significativo” de posibles ciberataques en sus operaciones. “La ciberseguridad es una aspecto muy importante para nuestra organización, y nos habíamos preparado a fondo en este aspecto”, expresan desde el comité en una carta remitida a The Guardian.
Incluso, el portavoz de Gobierno de Japón, Katsunobo Kato, ha declarado que el país hará todo lo posible para garantizar que la celebración de los Juegos estén libres de incidencias cibernéticas. “No podríamos pasar por alto una incidencia que pudiera también socavar los cimientos de nuestra democracia”, ha señalado.
-Idg.es