Para que los dispositivos se conecten a la red de redes, necesitan una dirección IP (Protocolo Internet). Cuando en 1981 se comenzó a usar el IP versión 4 (IPv4), casi como un experimento, no se pensó que pudiera tener tanto éxito comercial, pero dado que sólo dispone de 232 direcciones (direcciones con una longitud de 32 bits, es decir, 4,294,967,296 direcciones), era previsible que ante el imparable crecimiento de usuarios y dispositivos estas direcciones se agotarían.
Por este motivo, y previendo la situación, el organismo que se encarga de la estandarización de los protocolos de Internet (IETF, Internet Engineering Task Force), ha trabajado en los últimos años en una nueva versión del Protocolo de Internet, concretamente la versión 6 (IPv6), que fue presentada el 16 de mayo de 2000, #UnDíaComoHoy.
Esta versión posee direcciones con una longitud de 128 bits, es decir 2128 posibles direcciones (340,282,366,920,938,463,463,374,607,431,768,211,456), o dicho de otro modo, 340 sextillones o 670 mil billones de direcciones.
El despliegue de IPv6 se irá realizando gradualmente, en una coexistencia ordenada con IPv4, al que irá desplazando a medida que los dispositivos de cliente, los equipos de red, las aplicaciones, contenidos y servicios se vayan adaptando a la nueva versión del protocolo de Internet.
Por ello, es importante que entender cómo se realiza el despliegue del nuevo protocolo de Internet, tanto si es un usuario residencial, empresarial, un proveedor de contenidos, un proveedor de servicios de Internet o si labora en la administración pública.
-Por José Luis Becerra, CIO México