Los profesionales del área de Tecnologías de la Información sacan cuentas más que felices. Sus habilidades son altamente cotizadas en el mercado laboral, las empresas luchan para atraerlos y retenerlos y cada vez son más las industrias que necesitan contar con ellos. Una tendencia ajena a los vaivenes del mercado y que no pretende cambiar muy pronto.
La TI está detrás de todas las áreas hoy
Así lo confirmó la recién presentada Guía Salarial 2024 de la empresa de reclutamiento especializado Robert Half, que analizó las principales tendencias salariales y del mercado laboral, confirmando que la tecnología es un área fundamental.
Fundamentales para industrias tan diversas como ingeniería, finanzas y contabilidad, servicios financieros, recursos humanos o ventas y marketing, “los profesionales de área de tecnología cuentan con una serie de habilidades que hoy se necesitan para encarar con éxito la necesidad de digitalización y automatización en muchos sectores”, expresó Karina Pérez Galindo, Managing Director de Executive Search en Robert Half para los Países Bajos.
El papel de la tecnología en la estrategia corporativa
Para la ejecutiva, “las decisiones estratégicas en las empresas dependen cada vez más de la tecnología, por lo que los profesionales que manejan habilidades de este tipo son cada vez más requeridos y rara vez cuentan con una sola propuesta de trabajo”.
Profesionales capacitados: un dilema
Entre las conclusiones de la Guía Salarial, el mercado está buscando profesionales con habilidades para crear y desarrollar nuevos proyectos, manejo de cloud y data science, robótica, inteligencia artificial, softwares de gestión en general y mucha capacidad para analizar datos. “Y las áreas son tan diversas como minería, energía, agroindustria, retail, logística, transporte y distribución o fabricación de manufacturas, cada una con sus desafíos y complejidades”, destacó Perez Galindo.
Más allá de las habilidades técnicas
Además de habilidades relacionadas directamente con cada profesión, el mercado laboral se muestra cada vez más interesado por contar con talentos que combinen esas capacidades con habilidades blandas como la comunicación, gestión y liderazgo a distancia, destrezas para trabajar en equipo, adaptabilidad, flexibilidad, entre otras. “El trabajo ahora es mucho más dinámico, la interacción es constante aunque remota en muchos casos, lo que lleva a los equipos a trabajar en distintos lugares. Y eso requiere profesionales que también posean esas características como factores excluyentes”, explicó Pérez Galindo.
Hacia un nuevo modelo de trabajo
El trabajo remoto se afianzó durante el último año, pasando de ser una solución de emergencia como consecuencia de la pandemia a un modelo de trabajo en franca consolidación.
“Las empresas y trabajadores comprobaron el trabajo remoto funciona y ahora están en una etapa de definir bajo qué circunstancias adoptarlo. En algunos casos será la nueva forma de trabajo, en otros deberá ser presencial y también existe la opción del trabajo híbrido, combinando jornadas presenciales y remotas”, dijo la ejecutiva de Robert Half.
El otro aspecto destacado por la Guía Salarial 2024 en materia de trabajo remoto apunta a las posibilidades laborales. “El trabajo remoto abre nuevas opciones laborales”, destacó.
Atracción de talento: mucho más que dinero
Otra tendencia que destaca en el mercado laboral es la mayor conciencia que tienen los profesionales sobre los beneficios que ofrecen las empresas a sus trabajadores. Eso ha motivado a las compañías a tomar medidas para atraer y retener talentos, la principal preocupación de los gerentes durante este último año.
El 80% de los profesionales consideraría cambiar de trabajo si recibe una oferta, por lo que las políticas de beneficios están cambiando significativamente. “La tendencia es ofrecer beneficios flexibles, basados en las necesidades de los trabajadores, y muchos de ellos se relacionan con la irrupción del trabajo remoto, apuntando a mejorar las condiciones de quienes trabajan a distancia”, señaló Pérez Galindo.
Otro factor fundamental es la decisión de las empresas para adoptar políticas de diversidad, equidad e inclusión. “Aunque el tema está en la mesa, sobre todo desde la perspectiva de género y la inclusión de la mujer, hay una serie de otros factores por explorar, como el tema de la edad, la multiculturalidad o la discapacidad”, apuntó la directora de la consultora.