Visibilizar la importancia estratégica de quienes impulsan, desarrollan y protegen al talento dentro de las organizaciones. Este año, la conmemoración llega en un momento clave: la función de RRHH enfrenta más estrategia y protagonismo que nunca.
Las nuevas demandas del talento, el avance acelerado de la inteligencia artificial (IA), la escasez de perfiles especializados y la urgencia de replantear la cultura organizacional están redefiniendo las prioridades del área.
1. Cultura organizacional: del discurso a la práctica
De acuerdo con el informe “Top 5 Priorities for HR Leaders in 2025”, de Gartner, el 97% de los líderes de RRHH desea transformar algún aspecto de la cultura en su organización. Sin embargo, sólo una minoría logra convertir ese deseo en acciones concretas. Más del 50% reconoce que los líderes no se sienten realmente responsables de transmitir los valores culturales en sus equipos.
Este desfase tiene consecuencias directas. Una cultura mal gestionada reduce la retención, debilita la productividad y pone en riesgo la reputación interna de la empresa. En cambio, cuando la cultura se integra en comportamientos, procesos y liderazgo, se incrementa el compromiso y el rendimiento individual.
2. Nuevas formas de trabajar o el bienestar como prioridad estratégica
Casi la mitad de los trabajadores a nivel global experimenta niveles altos de estrés diario y solo el 21% siente que su empleador apoya su bienestar mental. A esto se suma una contradicción relevante: mientras el teletrabajo es valorado, quienes trabajan en modalidad presencial exclusiva reportan menor satisfacción, según revela el estudio “Tendencias Laborales 2025” de ManpowerGroup.
Ante ello, las empresas que están rediseñando sus espacios y modelos de trabajo, desde la flexibilidad hasta la salud emocional, logran mejores tasas de retención y compromiso. De hecho, la inversión en programas de salud mental puede multiplicar hasta por cuatro la productividad de los equipos.
El bienestar ya no es un lujo, es una expectativa. En México, el 42% de las empresas prioriza el salario emocional como parte de su estrategia para retener talento, de acuerdo con los resultados del “Market Research 2025”, de Pandapé . Y no es casualidad: los colaboradores comprometidos pueden ser hasta un 22% más productivos y generar una reducción de rotación de entre 25% y 65%.
Los beneficios más valorados hoy incluyen flexibilidad de horarios, tiempo personal, salud mental y oportunidades de desarrollo profesional. Las organizaciones que logran traducir estas necesidades en políticas efectivas fortalecen su marca empleadora y mejoran su capacidad de atracción.
4. IA y talento: una transformación silenciosa pero imparable
El 71% de las empresas ya utiliza la IA generativa en al menos una función. Pero más allá de la tecnología, lo que realmente está ocurriendo es una reconfiguración profunda de los perfiles, procesos y habilidades, reporta el análisis “The State of AI 2025”, elaborado por McKinsey.
De esta manera, la mitad de las empresas prevé contratar más científicos de datos en los próximos 12 meses. Y 6 de cada 10 ya han iniciado planes de reskilling para preparar a su fuerza laboral. Las organizaciones que están capturando valor real no solo desarrollan algoritmos, sino que rediseñan flujos de trabajo y forman a sus líderes para guiar la transformación con propósito.
Celebrar a los profesionales de RRHH es también reconocer que sin estrategia de talento, no hay futuro empresarial. Las compañías que priorizan el desarrollo humano, el bienestar integral y la evolución de las habilidades no solo fortalecen su cultura interna, también ganan capacidad de adaptación en un entorno que exige cada vez más agilidad y visión, concluyó Pandapé.